Interior aún ignora la cantidad de Goma 2 robada en Asturias

La Guardia Civil no ha podido determinar aún la cantidad exacta de Goma 2 que fue robada en una mina de Asturias para la comisión del 11-M. Es más: se considera "casi imposible" precisar el monto cierto. Los Tedax de la policía calcularon el 5 de abril que podrían haber sido unos 210 kilos, tomando como base la capacidad del maletero de un turismo medio, ya que se suponía que el explosivo fue trasladado a Madrid en un coche de esas características. Pero las pesquisas posteriores sugieren que hubo dos coches.

La investigación sobre el robo de explosivos no ha aclarado el trasiego de la Goma 2 Eco con la que se perpetró la matanza (191 muertos, incluido el geo Francisco Javier Torronteras). La revisión de los libros de registro de entradas y salidas de explosivos de la mina Conchita (Belmonte de Miranda, Asturias) no ha permitido precisar lo robado, ya que, el encargado de anotar los consumos (el capataz Emilio Llano, encarcelado) no fue fiel en las inscripciones.

El cálculo inicial de los artificieros no parece exacto, ya que se hizo suponiendo que el explosivo se trasladó desde Asturias a Madrid en un solo coche. Los Tedax elaboraron un informe que decía: "El maletero de un turismo medio, con una capacidad de 250 litros, podría transportar una cantidad aproximada de unos 210 kilogramos de dinamita en bolsas", eliminando las zonas muertas, donde no es posible encajar dicha bolsas.

Pero las investigaciones posteriores y una escucha telefónica del 26 de febrero (en el marco de otra investigación cuyo resultado no fluyó) indican que el 28 de febrero el explosivo fue trasladado en dos coches hasta Burgos. Hasta allí se desplazó un miembro del comando con una furgoneta, posiblemente la Renault Kangoo hallada en Alcalá de Henares, para recoger el contenido de dichos vehículos. No se sabe si ambos venían cargados.

El recuento del explosivo utilizado el 11-M, en el intento de atentado contra el AVE Madrid-Sevilla del 2 de abril, en el suicidio colectivo de Leganés y el que quedó esparcido por el bloque dinamitado tampoco es preciso. Tomando como base el explosivo contenido en la bomba desactivada, 10,210 kilos, se estima que en los 13 artefactos (10 estallados, dos explosionados y uno desactivado) se calculó que en los trenes se habían empleado 142 kilos. A ello hay que sumar los 17,431 kilos de la bomba del AVE y los 20 reventados en el suicidio colectivo, es decir, 178 kilos. Hay que añadir el explosivo esparcido [en Leganés] y el succionado por la depuradora de la piscina del edificio de la calle de Carmen Martín Gaite. "Sobre estas estimaciones y suponiendo un solo transporte" en un turismo medio, "la cantidad que pudiera quedar de explosivo sería menor al 10%", escribe el juez Del Olmo.

Las investigaciones posteriores de la Guardia Civil arrojan más sombra, ya que los explosivos y los envoltorios vacíos hallados en Leganés pertenecen a cinco envíos diferentes de Goma 2 a la mina Conchita efectuados en 2004 por un total de 3.600 kilos. Las anotaciones de los libros de registro muestran que hasta el 18 de marzo Llano anotaba cantidades redondas de dinamita consumida en las voladuras (50, 100 o 200 kilos), pero a partir de esa fecha reflejó "consumos más precisos" (75, 25, 45).

Además, tomando como base los diferentes registros documentales, la Guardia Civil ha apreciado "unos desfases relevantes" de los consumos de 415 kilos en enero de 2004; de 327,5 kilos en febrero y de 585 kilos en marzo. Este galimatías de cifras ha conllevado que no se haya podido precisar aún cuánto se llevaron los terroristas de la mina asturiana y a que las fuentes consultadas de la Guardia Civil y del Cuerpo Nacional de Policía crean que va a ser "casi imposible" saberlo, si queda algún remanente y, si falta, dónde está.