'Mar adentro', ovacionada en el Festival de Cine de Toronto

Toronto es desde el pasado 9 de septiembre, y no Los Ángeles, la capital del cine, con una programación que supera el centenar de títulos y ha convocado a más de 2.000 profesionales de la industria ante un público que abarrota las salas en unos pases tan llenos como en Venecia y que aún quiere más.

Javier Bardem fue la figura más esperada del festival, y su última obra, Mar adentro, la más comentada, aún fresca su victoria en la Mostra de Venecia. Pese a la confusión sobre la traducción de su título, a veces Out to sea, otras The sea within y otras The sea inside, Mar adentro ha sido el centro de todas las conversaciones de Toronto, dispuestas a acertar, con cuatro meses de antelación, los nombres de los candidatos al Oscar. Porque ésta es la principal moneda de cambio que puede ofrecer Toronto en una agenda que estas fechas está plagada de festivales, un certamen convertido en los últimos años en la mejor cartelera para todos los estrenos que tienen el Oscar como meta.

Este puede ser el destino de Hotel Rwanda, otra de las cintas mejor recibidas durante la celebración de este festival, donde el único premio que se concede es el del público. La otra ovación estuvo dirigida al polémico documentalista Michael Moore, recibido con entusiasmo en un festival hasta el que llegan los ecos de la campaña electoral del país vecino. "Los gobiernos se tienen que dar cuenta de cómo oprimen a su gente", subrayó Sean Penn en uno de sus múltiples comentarios en contra de Bush durante la presentación de The assassination of Richard Nixon. Además, el documental Going upriver: The long war of John Kerry aprovechó el certamen para ofrecer la cara afable del aspirante demócrata a la presidencia estadounidense. La biografía de Ray Charles puede llevar al palmarés de los Oscar a otro actor negro y debutante en estas lides, Jamie Foxx, por su impecable retrato del genio musical fallecido este año. Un pronóstico difícil de esperar en el caso de la última película de David O. Russell, su primer trabajo desde Three kings, para el que ha sabido aunar a un reparto de estrellas como Dustin Hoffman, Isabelle Huppert, Jude Law o Naomi Watts, en una comedia existencialista que pocos supieron reír.