Powell califica de genocidio las atrocidades en Sudán

El secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, elevó ayer la presión sobre Sudán al calificar de "genocidio" las atrocidades que está cometiendo la milicia árabe Janjawid en Darfur. Es la primera vez que la Administración estadounidense usa este término para denunciar los abusos que está sufriendo la población negra en esa región del oeste de Sudán. Estados Unidos advierte de que la tragedia humana puede agravarse con la llegada de las lluvias este otoño.

Powell intervino ante la comisión de Política Exterior del Senado para informar sobre la situación en Darfur y los pasos dados por Sudán para proteger a la población civil. A partir de entrevistas realizadas a más de 1.100 víctimas, el secretario de Estado concluye que "se ha cometido un genocidio" del que Jartum y las milicias árabes "son los responsables". "El Gobierno ha apoyado directa e indirectamente a los Janjawid", reiteró, mientras advertía de que "las atrocidades continúan".

El informe del Departamento de Estado recoge que el 61% de las víctimas denunció que algún miembro de su familia había sido asesinado por las milicias, y el 16% dijo haber sufrido violaciones o haber oído hablar de abusos de este tipo, además de aportar fotos sobre la destrucción de aldeas. Washington señala que no se han producido progresos para poner fin a los ataques, desarmar a la milicia y detener a sus líderes. Colin Powell recordó que Sudán, como país firmante de la Convención contra el Genocidio, está obligado a prevenir y castigar estas atrocidades.

Acciones de castigo

En este sentido, señaló que la ONU debe considerar la adopción de "acciones apropiadas" de castigo. El nuevo proyecto de resolución presentado por EE UU ante el Consejo de Seguridad retoma la amenaza directa de sanciones, además de pedir una mayor presencia internacional con tropas para controlar la situación, con un papel primordial de la Unión Africana. "Seguiremos presionando", dijo Powell, mientras insistía en que los compromisos adquiridos por las autoridades sudanesas para acabar con la violencia no deben quedarse en falsas promesas. El Departamento de Estado señala que la situación debe cambiar rápidamente antes de la llegada de las lluvias. "Decenas de miles de seres humanos están a riesgo de muerte".

Una vez expirado el plazo concedido por la ONU al Gobierno sudanés para desarmar a las milicias Janjawed, el nuevo borrador que prepara el Consejo de Seguridad prevé introducir sanciones que podrían afectar al sector petrolífero en el caso de que Jartum no cumpla sus compromisos antes de la nueva fecha límite que se establezca. La resolución en ciernes también aboga por la extensión del volumen y el mandato de la fuerza de pacificación de la Unión Africana (UA) actualmente presente en Darfur, la vigilancia aérea internacional de la región, con objeto de impedir los vuelos militares sudaneses, y un veredicto del secretario general de la ONU, Kofi Annan, sobre la existencia de actos de genocidio y sus responsables.