Fallece uno los ocho enfermos contagiados de hepatitis C

Francisca Gutiérrez Fenies, de 83 años y una de las ocho personas contagiadas en diciembre de hepatitis C en el hospital de Alcorcón a causa de una negligencia, murió a las 6.00 de ayer por la "propia progresión" del mieloma -un cáncer que afecta a la médula ósea, entre otros huesos- que sufría, según el hospital. La familia, sin embargo, se quejó ayer de que este centro médico "nunca informó" a la enferma de que sufría hepatitis, y que la mujer "decidió dejar la quimioterapia" a causa del "malestar físico" que empezó a sentir a los dos meses de resultar infectada.

La hepatitis C que contrajo Francisca Gutiérrez Fenies no le ha causado la muerte, pero sí que la ha acelerado y, sobre todo, le ha restado calidad de vida en los meses anteriores al fallecimiento. Ésta es la opinión de Juan Manuel García, hijo único de Francisca.

"No podemos decir que estemos nada contentos con el trato recibido por el hospital en todo este asunto", declaró García. "Nunca nos dijeron que mi madre estuviera contagiada. Fue su médico de cabecera, en San Martín de Valdeiglesias, el que se dio cuenta, mirando unos análisis, que había dado positivo de hepatitis C. Y fue él quien nos recomendó que preguntáramos en el hospital qué había ocurrido", añadió.

"Pero ni al preguntarlo fueron claros. El médico me despachó con un simple 'puede ser', sin dar ninguna otra explicación. Hasta que leímos en los periódicos la información sobre el contagio no atamos cabos, y fue entonces cuando nos dimos cuenta de lo que había sucedido", explicó el hijo de la fallecida.

Mieloma múltiple

El mieloma múltiple, un tipo de cáncer que afecta a los glóbulos blancos presentes en varios huesos y tejidos del cuerpo, principalmente en la médula ósea, es una enfermedad larga, dolorosa y de difícil tratamiento. El malestar que ya sufren los pacientes por el propio cáncer y por las sesiones de quimioterapia se vio agravado en este caso por la hepatitis.

"Mi madre era una mujer muy fuerte que había decidido someterse a la quimioterapia con valentía. Pero a partir de febrero o marzo empezó a sentirse cada vez peor, hasta el punto de renunciar a recibir más sesiones de quimioterapia, lo que presumiblemente ha acelerado el desarrollo del cáncer", explicó García.

"Fue precisamente en febrero y marzo cuando el resto de los contagiados desarrollaron la hepatitis, por lo que nunca sabremos a qué se debía el malestar que sentía mi madre, si al propio cáncer o a la hepatitis. Si el hospital hubiera sido más claro...", se lamentó.

El hospital de Alcorcón comunicó a los afectados hace dos semanas la causa del contagio, que se produjo el 9 de diciembre del año pasado y afectó a ocho enfermos de cáncer que recibían quimioterapia en el centro. Un fallo humano contaminó del virus de la hepatitis C el contenido de un envase multidosis de suero fisiológico, que infectó a todos los enfermos a los que les fue suministrado. Sanidad ha decidido ahora dejar de usar este tipo de envases y sólo utilizar sueros de una sola dosis, o unidosis, para reducir el riesgo de nuevos contagios.

Rafael Martín Bueno, abogado que la Asociación de Víctimas de Negligencias Médicas (Avinesa) ha puesto a disposición de siete de los ocho afectados, señaló que el caso de Francisca es un ejemplo de las responsabilidades en las que ha incurrido el hospital de Alcorcón.

"Además del contagio, los pacientes han sufrido otros perjuicios. Uno de los más importantes es la supresión del tratamiento de quimioterapia que necesitan, debido al malestar que causa la hepatitis y a la imposibilidad de recibir más sesiones de quimioterapia en la fase aguda de la infección del hígado. Esto, indudablemente, acelera el desarrollo del cáncer y la muerte del enfermo, como puede haber pasado en este caso", explicó Martín Bueno.

El abogado lamentó ayer que, "pese a las buenas palabras del consejero de Sanidad, Manuel Lamela, la aseguradora del hospital todavía no se ha puesto en contacto conmigo". "Sólo se me ocurre pensar que están retrasando deliberadamente el inicio de las negociaciones para enfriar o retrasar el pago de las indemnizaciones. Si esto sigue así, la intención de los afectados es iniciar en las próximas semanas las acciones judiciales que habíamos querido evitar", añadió.

El hospital de Alcorcón considera que ha sido la "propia progresión de la enfermedad oncoló-gica" la causa de la muerte de la mujer. En contra de lo manifestado por la familia, el hospital sostiene que ha informado en todo momento de la enfermedad a los afectados y que la difunta Francisca ha recibido todos los tratamientos pertinentes en este caso.