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ERC exige a Maragall que "no pierda el tiempo" en debates "nominales"

Puigcercós: "Todas las comunidades son históricas, no sólo Cataluña"

Esquerra Republicana (ERC) exhortó ayer al presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, a "no perder más el tiempo" en asuntos simbólicos y "nominales" y le invitó a centrar el debate sobre la reforma de la Constitución y de los Estatutos en las competencias y la financiación. El secretario general de ERC, Joan Puigcercós, propuso que se cite a Cataluña como "comunidad nacional" y se olvide la expresión "nacionalidad histórica" para no prender "incendios" en otras comunidades. "Todas son históricas", sentenció.

ERC dejó ayer atrás la tradicional aversión de los nacionalistas catalanes a la fórmula del café para todos sobre la que se fundó el Estado de las autonomías. A diferencia de Convergència i Unió (CiU) e incluso de amplios sectores del Partit dels Socialistes (PSC), Esquerra ya no considera que el reconocimiento singular de Cataluña en la Carta Magna sea una prioridad: "¡Café para todos, copa y puro!", señaló gráficamente a este periódico el secretario general de ERC para subrayar que no se opone a que otras comunidades reclamen lo mismo que Cataluña.

El giro de Esquerra se empezó a expresar ya en las pasadas elecciones europeas. Mientras que CiU trabó su coalición electoral exclusivamente con partidos de lo que considera "nacionalidades históricas" -vascos, gallegos y comunidades de habla catalana-, Esquerra incorporó a su candidatura a andaluces, asturianos, castellanos y cántabros, entre otros.

"Nosotros tenemos que presentar nuestra propuesta y no entrar en debates sobre qué quieren los demás", añadió Puigcercós, quien dijo que ERC no pondrá ningún inconveniente en que las comunidades que no tuvieron Estatuto en la Segunda República se definan también como "comunidad nacional". "La expresión comunidad nacional acaba con las ambigüedades y no hiere sensibilidades", insistió el dirigente republicano. Puigcercós se mostró partidario de "no perderse" en discusiones que "confunden" y son "agua de borrajas".

La contundencia de las palabras del secretario general de Esquerra, que gobierna la Generalitat de Cataluña junto con el Partit dels Socialistes (PSC) e Iniciativa per Catalunya Verds (ICV), no significa que el partido considere irrelevante el debate simbólico. Pero los republicanos están viviendo con desasosiego cómo las discusiones previas a la reforma institucional en marcha se centran en asuntos "nominales" y no abordan las competencias y la financiación autonómica.

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Esquerra ve incluso con suspicacia la insistencia del presidente de la Generalitat, el socialista Pasqual Maragall, de que Cataluña sea citada como nacionalidad en la Carta Magna y le pidió que no "distraiga" a los ciudadanos con un debate que "a la postre puede esconder un intento de aguar" la reforma.

"El nombre es importante si va acompañado de contenidos", subrayó Puigcercós, quien emplazó a Maragall a "pilotar la nave" de la reforma del Estatut en lugar de "entretenerse en diseñar" un nuevo formato para la Diada. "No hace falta que se preocupe de encargar trajes de gala para los mossos", remachó con ironía. Puigcercós tampoco ve el proceso de Cataluña como un modelo para el País Vasco: "Nosotros no tenemos que dar lecciones a nadie", sentenció. Los socialistas prefirieron ayer guardar silencio ante el tirón de orejas de Esquerra en un terreno que no habían previsto. Los socialistas están poniendo un gran empeño en el nuevo acto institucional de la Diada -que en cierta forma pretende emular la grandeur francesa del 14 de julio- y aspiran a que la Constitución distinga de algún modo entre las nacionalidades -que tuvieron Estatuto en la República más Andalucía- y el resto, lo que les origina conflictos con sectores del PSOE.

Críticas de Mas

En cambio, el jefe la oposición parlamentaria, el convergente Artur Mas, aprovechó las críticas de Esquerra para censurar por igual a Maragall y a los republicanos. Al presidente de la Generalitat, por alimentar el "confuso" debate sobre la Diada. Y a los republicanos, con ironía, por su "amplia capacidad de obrar" al representar simultáneamente los papeles de Gobierno y oposición: "No pueden ser todos los personajes del auca ni salir en todas las fotos", dijo en su visita a las fiestas de Gràcia. Mas dijo que el debate "nominalista" no es prioritario, pero aclaró: "Cataluña es una nación, y dejémonos de historias".

Por su parte, el vicepresidente de ICV Jordi Guillot subrayó que el modelo de reforma estatutaria impulsado en Cataluña no afecta sólo al procedimiento, sino que también se hará notar en contenidos. El dirigente ecosocialista se solidarizó con Esquerra ante el "gesto poco democrático y agresivo" del PP de acudir al Tribunal Constitucional para tratar de impedir un grupo propio republicano en el Congreso. Puigcercós justificó la actitud del PP por su necesidad de "alimentar la fiera franquista".

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