Las empresas que cierren deberán devolver las ayudas para I+D que reciban

No habrá más casos como el de Samsung. Las empresas que reciban ayudas del Gobierno catalán, concretamente para potenciar la investigación, el desarrollo y la innovación (I+D+i), deberán devolverlas a partir de ahora en el caso de que, en el plazo de siete años, cesen en su actividad en Cataluña voluntariamente o si el dinero no se destina a los objetivos que motivaron la subvención. En lo que queda de año, la Generalitat ayudará con 24,2 millones de euros a las empresas que innoven.

La decisión, anunciada ayer por el consejero de Trabajo e Industria, Josep Maria Rañé, supone seguir la estela de la Comisión Europea, que también considera de ida y vuelta las ayudas comunitarias concedidas a las empresas que se instalen en otro país.

La decisión de Bruselas ha caído como agua de mayo en la Generalitat, vistas las críticas que ésta recibió, sobre todo del anterior Gobierno del PP, por su reacción ante el alud de deslocalizaciones de los últimos meses. Entonces ya se sugirió que deberían pagarse elevadas indemnizaciones, ayudar a recolocar a los empleados y a reindustrializar una zona afectada, o devolver las ayudas. Sobre todo cuando las empresas tenían beneficios y sólo cerraban para ganar más en países con menores costes.

Las ayudas deberán devolverse si el cese de actividad en Cataluña es "voluntario", lo que determinará la propia Generalitat. Esta exigencia, que hoy no existe, se plasmará en una cláusula que se introducirá en cuatro normativas que se aprobarán en breve. La medida no tendrá carácter retroactivo: las ayudas ya concedidas no se verán afectadas.

Estas cuatro normativas prevén para lo que queda de año 24,2 millones de euros de ayudas, que pretenden ser un empujón para un cambio de modelo de competitividad: de los bajos costes a una mayor productividad, con actividades de alto valor añadido. Además, habrá otros seis millones para fomentar centros tecnológicos.

Las ayudas, que serán más cuantiosas para las pequeñas y medianas empresas (pymes) y en ningín caso se otorgarán a compañías en crisis, se repartirán así: 5,7 millones para sectores que se deban potenciar (aeroespacial, farmacéutico, agroalimentario de segunda generación y producción de maquinaria tecnológicamente avanzada); 12 millones para sectores maduros pero no obsoletos (automoción, textil y electrónica de consumo); 3 millones para proyectos de I+D en que participen empresas, organismos públicos y privados de investigación, y centros tecnológicos, y 3,5 millones para proyectos de investigación industrial y pymes que innoven en gestión, diseño o tecnología.