El sector lácteo niega que exista un gran exceso de producción

La asociación interprofesional en el sector de la leche, Inlac, formada por ganaderos e industriales, ha rechazado la existencia de una masiva producción de leche negra o sin cuota. En la misma línea, señalan que en este momento, frente a lo que sucedía en el pasado, hay mayor transparencia y más controles desde la producción a la industria en el sector lácteo, lo que ha supuesto una fuerte reducción de este tipo de oferta ilegal.

Para los responsables de la interprofesional, carece de sentido la reciente denuncia hecha en Bruselas por Prolec, una organización minoritaria de ganaderos cuya entrada no fue aceptada en este organismo. Este grupo asgeura que en España hay una producción de leche negra de 2,7 millones de toneladas, lo que supondría el 46% de la cuota oficial, de 6,1 millones de toneladas, asignada a España por las autoridades de la Unión Europea.

La denuncia realizada por esta organización, con apoyo de algunos grandes ganaderos catalanes, ha sido rechazada tanto en el propio sector como en medios de la Administración. Desde la Federación de Productores Lácteos se acusa a los responsables de Prolec de no haber querido hacer una denuncia de este tipo de leche hace años, cuando era un grave problema, mientras la hace en este momento por razones políticas, cuando las soluciones se hallan en marcha. Desde esta organización se estima que la leche negra en su día pudo llegar a un millón de toneladas, pero que en este momento la cifra es muy inferior gracias al incremento de los controles.

Explicación coherente

La Federación de Industrias tampoco halla una explicación coherente al hecho de que un grupo minoritario de ganaderos haga una denuncia en tales términos. Así, considera muy grave que, por otras razones o intereses que nada tienen que ver con la realidad del sector, se hagan este tipo de denuncias sin datos fidedignos.

El presidente de la interprofesional, Miguel Ángel Díaz Yubero, considera que ganaderos e industriales se hallan comprometidos en el cumplimiento de las cuotas lácteas determinadas por Bruselas y resta importancia a las denuncias de un grupo minoritario, a las que no encuentra ninguna justificación.

En la Administración se rechaza igualmente esta acusación.Se considera que no hay razones objetivas para la denuncia y, en todo caso, se confía en que en Bruselas domine el sentido común y que no se asuman acusaciones como ésta sin un fundamento sólido.

En relación con la cuota láctea, el sindicato agrario Unión de Pequeños Agricultores (UPA) reclama una gestión única y uniforme de la misma a escala estatal para evitar una política diferente en cada comunidad autónoma.