Campesinos bolivianos impiden el envío de gas a Argentina
Los campesinos de la localidad de Santa Rosa del Sara, en el departamento boliviano de Santa Cruz, cerraron las válvulas de una estación de bombeo de gas que afectó el normal suministro energético a Argentina, informaron ayer fuentes oficiales.
Una portavoz de la empresa operadora del gasoducto Transredes, participada por la angloholandesa Shell y la estadounidense Enron, dijo que había evacuado a sus ocho empleados de la estación, a la espera de una solución del conflicto. "Nosotros no tenemos que ver en este asunto, pero estamos en el medio del conflicto entre las autoridades y los pobladores de Santa Rosa", dijo la fuente empresarial.
Los campesinos de Santa Rosa del Sara, ubicada a 120 kilómetros al norte de la ciudad de Santa Cruz, reclaman a la prefectura de ese departamento el inicio inmediato de obras de asfaltado en una carretera de la región y amenazan con no levantar la medida de presión hasta que se envíen maquinarias de trabajo pesado a la zona.
"Estamos aplicando un plan de contingencia para que el impacto sea el mínimo" sobre los volúmenes de gas enviados a Argentina, dijo una funcionaria de la empresa, quien no especificó el efecto de la acción sobre el negocio, aunque otras fuentes del sector dijeron que la reducción fue de un millón de metros cúbicos. Bolivia tiene con Argentina un contrato para exportar durante seis meses cuatro millones de metros cúbicos diarios de gas.
Las negociaciones con los campesinos comenzaron el martes y, según el prefecto, Carlos Hugo Molina, ya se había enviado la maquinaria a la zona de tal forma que se espera que los campesinos levanten la medida de presión.
