El juez ordenó a la Guardia Civil investigar la trama de los explosivos de los atentados

La Guardia Civil mantiene que los agentes que visitaron al confidente Rafá Zouhier en la cárcel de Valdemoro los días 9 y 14 de abril lo hicieron en el curso de la investigación sobre la trama de explosivos que le encomendó el juez Juan del Olmo, que instruye en la Audiencia Nacional la causa por el atentado de los trenes. Un informe que la fiscal del caso, Olga Sánchez, elaboró el 1 de mayo pasado a petición del fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Eduardo Fungairiño, señala las causas que llevaron a encargar a la Guardia Civil la investigación de uno de los aspectos cruciales de los atentados del 11-M, referidos al sistema empleado por los terroristas para hacerse con los explosivos que colocaron en los trenes de cercanías.

Lo que sigue es la parte del informe redactado por la fiscal del 11-M el 1 de mayo referido a la investigación sobre los explosivos:

"Otra línea de investigación es la de los explosivos encontrados en el interior de la bolsa de plástico de color azul, intervenida en el Pozo del Río Raimundo y llevada a la Comisaría de Vallecas.

He mencionado que había en su interior 10,120 kilogramos de una sustancia blanquecina, gelatinosa, de textura parecida a la plastilina que los Tedax identificaron preliminarmente como Goma 2/dinamita con el logotipo ECO.

Como consecuencia de la declaración de un imputado llamado José Emilio Suárez Trashorras, que trabajó como minero en la mina de Caolines de Merilles, llamada Minas Conchita, el cual había conocido a través de un cuñado suyo, el imputado Antonio Toro Castro a un marroquí, también imputado llamado Rafá Zouhier, quien manifestó que lo había puesto en contacto con un grupo de marroquíes para operaciones de tráfico de drogas con los que habían mantenido varias reuniones tanto en Madrid como en Avilés (Asturias), localidad en la que residía el minero, se pudo llegar a determinar las identidades de esas personas que estaban en un principio interesadas en la venta e estupefacientes y que posteriormente solicitaron explosivos, realizando éstas un viaje a la citada localidad asturiana la tarde del día 28 de febrero, al parecer cuatro personas, pudiendo cargar en dos vehículos que se han identificado una cantidad en un principio no inferior a 100 kilogramos (aún sin determinar por los Tedax) que se pudo utilizar para la confección de las bombas días después en la localidad de Morata de Tajuña. El día 29 hacia el mediodía, viajan para Madrid en dos coches, un Golf de color negro, que pudiera ser de otro de los organizadores de los atentados llamado Jamal Ahmidan y que pudo transportar la sustancia explosiva y deduzco que venía precedida de un vehículo Toyota Corolla que era conducido por el citado Jamal Ahmidan, que podía hacer funciones de lanzadera (...).

Por lo anteriormente expuesto y el tipo de sustancia del que se desconocía su procedencia, solicité en su momento al Juzgado que por la policía se investigara acerca de la misma; estando adjudicada a la Guardia Civil el control, seguimiento, vigilancia y transporte de las sustancias explosivas que se puedan utilizar en las minas, obras de cantería y de carreteras, entre otras, se encomendó por el Juzgado la investigación de la procedencia de la referida sustancia, fabricación, distribución así como la utilización en las explosiones controladas en lo anteriormente mencionado. En la actualidad, la investigación que está llevando a cabo la Guardia Civil comprende, en primer lugar, la fabricación de la dinamita, habiéndose determinado la fecha y distribución de la misma en los meses de enero y febrero y comprobando las personas que han estado próximas al minero y que han podido contribuir a proporcionar distintas cantidades de explosivos a cambio bien de droga o de dinero. (...)La Guardia Civil ha presentado un primer informe en fecha 27 de abril pasado".