Dos incidentes agudizan la tensión en Osetia del Sur
Dos incidentes entre contingentes armados de Georgia y Osetia del Sur aventaron ayer las tensiones en este territorio caucásico autoproclamado independiente, que el nuevo presidente georgiano, Mijaíl Saakashvili, se ha propuesto recuperar. En el primero, dos georgianos resultaron heridos al ser atacados por osetios en un bosque situado entre dos pueblos habitados por georgianos dentro de la demarcación de Osetia del Sur. Un portavoz de esta república confirmó la información, pero manifestó que el lugar está controlado por pacificadores rusos y, en teoría, no debería haber en él ni pacificadores georgianos ni osetios. A tenor de un acuerdo tripartito firmado en 1992, tres batallones de 500 hombres cada uno (uno ruso, otro georgiano y otro osetio) se encargan de mantener el alto el fuego en la república rebelde en tanto se busca una solución política.
En el segundo incidente, los osetios del sur desarmaron a un contingente de 50 policías georgianos acuartelados desde hacía días en la escuela del pueblo de Vanati y detuvieron a 38 de ellos. Los osetios mantienen que los georgianos han infiltrado tropas suplementarias en el territorio de Osetia del Sur y superan con mucho la cifra de 500 que les está permitida. El ministro de Defensa osetio, Robert Gulyev, ha anunciado que continuará una campaña de limpieza para echar a las "bandas armadas" georgianas. Por su parte, el presidente Saakashvili dijo que los puestos policiales georgianos situados en la zona de conflicto tienen orden de disparar si son atacados. Ambas partes se acusan, respectivamente, de "provocación".
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