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EL FUTURO DE LA UNIÓN EUROPEA

"Volveremos con un acuerdo mucho mejor que el de la Convención"

P. E.,

"Volveremos de Bruselas con la Constitución europea, con un acuerdo mucho mejor para España que el de la Convención y con mejores posiciones en el Parlamento Europeo". El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, arriesgó este pronóstico genérico en su turno de réplica, que tampoco satisfizo al líder del PP. "Siempre está bien tener europarlamentarios, pero no intente convencerme de que con ello compensarán la pérdida de votos en el Consejo. Como no creo que esté usted dispuesto a cambiarme aquí algunos puestos de ministro por escaños de diputado", había dicho antes Mariano Rajoy.

Sólo en el tema de la lucha antiterrorista expresó el líder popular que "el Gobierno tendrá todo el apoyo de la oposición en este asunto". Rajoy hablaba, sin embargo, en el nombre muy particular de su propio partido, ya que el resto de los grupos se mostraron más abierto hacia las posiciones de Zapatero.

Incluso cuando se abordó la proyección europea de las lenguas co-oficiales, que ha frustrado las expectativas de los nacionalismos, la reacción de los portavoces fue moderada. El presidente confirmó que espera lograr la traducción del texto de la Constitución a dichas lenguas, pero no mucho más que ese "importante avance sobre el que seguir construyendo en el futuro".

Josep Antoni Duran Lleida, por CiU, le replicó que las traducciones de los grandes textos al catalán ya se hacen y pidió que la Constitución reconozca dicha lengua como co-oficial en Europa o que, al menos, se apruebe un anexo que reconozca el derecho de los catalanes a dirigirse en su idioma a las instituciones comunitarias. El portavoz del PNV, Josu Erkoreka, animó al Gobierno a que siga luchando por esos objetivos, en un tono mucho menos virulento del que el hoy senador Iñaki Anasagasti empleó la semana pasada para debatir este mismo asunto en el Congreso con el ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos.

"Un gran esfuerzo"

Zapatero reiteró que, con esta iniciativa, el Gobierno ha hecho "un gran esfuerzo" para "abrir una puerta importante". Otros temas que destacó de la agenda del Consejo Europeo del próximo jueves fueron el debate de las perspectivas financieras, en el que, aunque todavía sea genérico, se comprometió a luchar porque aumenten los recursos en lugar de disminuir, como quieren británicos y alemanes, y la política de seguridad y defensa. "España quiere situarse a la vanguardia de ese esfuerzo", dijo.

En relación con la designación del presidente de la Comisión, que se abordará mañana por la noche, Zapatero dijo que "España mantendrá una postura abierta", siempre que el candidato de consenso sea "un europeísta convencido". También confirmó el apoyo a la candidatura de Javier Solana para que siga como Alto Representante para la Política Exterior y de Defensa, con el compromiso añadido de que, cuando entre en vigor la Constitución europea, pase automáticamente a ministro de Exteriores.

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