"La participación del alumno en la gestión universitaria es imprescindible"

Maite Erro, profesora titular de Psicología Comunitaria, es el nuevo rostro del Rectorado ante los estudiantes de la UPV. Sostiene que la participación del alumno en la gestión universitaria es "imprescindible", afirmación que regirá los próximos cuatro años un trabajo en el que la captación de jóvenes y la mejora de la inserción laboral serán dos de sus claves de actuación.

Pregunta. ¿Cómo se piensa aplicar entre los alumnos el nuevo modelo de aprendizaje que promueve la Declaración de Bolonia con la precariedad económica que vive la UPV?

Respuesta. La UPV siempre ha considerado clave el papel del alumnado dentro de su formación. La Declaración de Bolonia ha establecido un principio programático, pero sin duda está en la línea de lo que ya estamos haciendo. En cuanto a la situación económica de la UPV, trasciende con mucho mi responsabilidad, pero desde luego no va a condicionar, en principio, nuestros proyectos ni nuestras expectativas.

"La mayoría de docentes dedica más tiempo del establecido para atender a los estudiantes"

"La pérdida de alumnos, que en sí no sería un problema, es algo que no hemos experimentado"

P. Una de las iniciativas previstas es un programa de captación de alumnado. ¿Teme la pérdida constante de estudiantes?

R. En primer lugar, este fenómeno no debería verse como algo terrible. Va a resultar inevitable dados los índices de natalidad. Además, puede ser una oportunidad para mejorar la docencia con grupos más reducidos. Por otra parte, y aunque ese posible descenso no sería nada dramático, me gustaría recordar que la UPV ha incrementado el número de alumnos de primero en los dos últimos cursos académicos. Sinceramente, la pérdida de estudiantes, que no sería en sí misma un problema, es algo que aún no hemos experimentado.

P. La inserción laboral de los titulados figura como otra de sus prioridades. ¿Qué medidas piensan tomar al respecto?

R. Partiremos identificando y elaborando un catálogo con lo ya existente, es decir, el Servicio de Inserción Laboral en el campus de Vizcaya, o las aplicaciones informáticas Praktiges y Lanbila. A continuación, nos centraremos en diseñar un plan de carácter transversal dirigido a apoyar y promocionar la capacitación para la inserción laboral y, con esta misma finalidad, nos gustaría desarrollar servicios de orientación en los tres campus de la UPV. Creemos necesario además elaborar un plan de formación en autoempleo incorporado en la programación docente ordinaria para el colectivo del alumnado de grado y postgrado.

P. ¿Es posible una atención personalizada al alumnado por el personal docente en una universidad como la UPV?

R. Cuanto mayor sea el número de estudiantes es evidente que resulta más difícil. No obstante, todo el profesorado con dedicación a tiempo completo tiene la obligación de dedicar seis horas semanales a la atención personalizada de sus alumnos. Una gran mayoría de docentes dedica más tiempo de lo establecido para este tipo de atención.

P. En su declaración de intenciones, se marca como objetivo el desarrollo de cauces de comunicación con los representantes de los estudiantes. ¿Cómo se va a concretar?

R. La participación del alumnado en la gestión universitaria es imprescindible. De hecho, ya se realiza, pero conviene profundizar en ese aspecto.

P. La ausencia de vida universitaria y de vinculación del alumnado con la UPV es un hecho patente. ¿Cómo se puede lograr?

R. Disiento de esa apreciación. Hay una intensa vida universitaria, con una notable programación extraacadémica. Desde luego, todo es mejorable y estrechar los lazos entre el alumnado y la institución entra en nuestros proyectos, aunque la gran movilidad que se produce por la descentralizada estructura de nuestra universidad dificulta la plena vinculación.

P. Una de las quejas más frecuentes del alumnado y los sindicatos es el uso de becas de colaboración como trabajo encubierto. Los tribunales ya han dictado varias sentencias a favor de becarios que han demandado a la UPV por ello. ¿Qué tiene pensado hacer ante esta situación?

R. Sé que existe alguna sentencia al respecto, que no se ha generalizado y que mantendrá las características propias de un caso concreto, pero el último Reglamento de Becas de la UPV lo determina claramente: la beca pretende fomentar la formación integral. Nunca un becario debe desarrollar tareas que sustituyan a un trabajador. Esto no impide que el disfrute de la beca, principalmente las bolsas o ayudas, conlleve una intensa actividad en un servicio concreto de la universidad. Sin embargo, mediante el desempeño de estas funciones, el becario o la becaria adquiere experiencia práctica, así como poder disponer de recursos económicos para continuar con sus estudios.

P. Entre las polémicas que tuvo que afrontar el anterior equipo de gobierno, la del alumnado en centros penitenciarios fue una de las más virulentas. ¿Qué medidas piensa tomar el Rectorado ante este asunto?

R. El rector expuso la posición de la universidad a este respecto en el claustro del pasado 27 de mayo. Además, previamente, se había enviado una carta a la Dirección General de Instituciones Penitenciarias solicitando la puesta en marcha de un convenio que permita a los presos estudiar en la UPV, posibilidad que está contemplada en la propia reforma de la Ley General Penitenciaria.