La peculiar situación de la asignatura de Religión este curso

El Gobierno mantendrá la asignatura de Religión durante los dos próximos cursos académicos tal y como está en el que ahora acaba. Es el plazo que se ha dado para debatir, realizar e intentar que se apruebe una nueva reforma educativa. En ese tiempo, se discutirá, entre otras cosas, el futuro de la enseñanza de religión en las aulas. ¿Cómo está ahora la asignatura de Religión?

La lluvia de declaraciones contradictorias sobre la enseñanza de la religión de unas y otras organizaciones políticas, educativas y religiosas por la polémica suscitada por la Ley Orgánica de Calidad de la Educación (LOCE) y su aplicación ha contribuido muy poco a que los ciudadanos tengan claro cuál es el estado actual de materia de Religión, que permanecerá intacto durante los próximos dos cursos.

Hoy por hoy es obligatorio que todos los centros educativos públicos y privados oferten la asignatura de Religión Católica de 1º de primaria (a los 6 años) a 1º de bachillerato (17 años) acompañada de diversas alternativas para los alumnos que prefieran no cursarla. Algunas alternativas son, por ejemplo, actividades de estudio o prácticas de informática. Ésta es la situación desde que se empezó a aplicar la Ley Orgánica de Ordenación General del Sistema Educativo (LOGSE), impulsada por los socialistas y aprobada en 1990.

La materia de Religión es evaluable, es decir, los alumnos que la cursan reciben una nota que figura en su expediente. Sin embargo, ni hace media con las demás materias ni cuenta, por lo tanto, a la hora de obtener una beca. Sus alternativas, en cambio, no son evaluables.

Cuenta para repetir curso

Pero este curso se ha modificado ya parcialmente la situación de la Religión al implantarse las primeras medidas de la LOCE. Una de ellas es la repetición de curso obligatoria en ESO con más de dos asignaturas suspensas, incluida la Religión.

Esto implica que los alumnos de ESO que hayan elegido Religión este curso o lo vayan a hacer los dos próximos y la suspendan tendrán que repetir curso si han suspendido otras dos materias más. En cambio, los que no la hayan escogido, no estarán en esta situación, al no ser evaluables las otras alternativas.

El Gobierno no ha podido paralizar la aplicación de esta medida, a pesar de que algunas organizaciones lo solicitaron, porque sólo podía suspender los cambios de la LOCE que no habían entrado en vigor este año.

El PP calculó que esta situación de desigualdad entre la religión y su alternativa duraría sólo un curso. Preveía que el próximo septiembre se empezara a implantar Hecho Religioso como única alternativa a la Religión Católica, que iba a contar también para repetir curso.