Al galope por la Plaza de España

Manuel no había visto un caballo de cerca en su vida y ayer no daba crédito a lo que tenía delante en el Parque de María Luisa de Sevilla. "¡Éste está comiendo! ¡éste está comiendo!", gritaba corriendo y tirando de la falda de su madre. "No se lo puede creer", explicaba la madre intentando justificar el entusiasmo desmedido del chaval. "Tiene un caballo de plástico que relincha y hay días en los que hasta le tengo que dar la cena ahí". "Venía pensando en darle de comer a las palomas y se ha encontrado con esto".

Lo mismo que a Manuel, de cuatro años, le pasó ayer a muchos de los que se acercaron a pasear al Parque de María Luisa o la Plaza de España aprovechando que en Sevilla era fiesta. En uno de los paseos centrales de los jardines se alineaban cientos de cuadras de otros tantos caballos que, desde ayer y hasta el domingo, participan en la I Muestra de Caballos Ciudad de Sevilla, Organizada por la Unión de Organizaciones Ecuestres de la capital (Unoes).

La iniciativa ha conseguido reunir a los principales criadores de de la provincia de Sevilla, que representan el 34% del total de los ganaderos de caballos españoles. No obstante, aunque los animales criados en la capital andaluza conforman la base del programa, a la muestra han acudido también ganaderías llegadas del resto del país. El marco incomparable del parque y la plaza suponen además un escaparate perfecto al que los turistas llegan sin necesidad de promocionar el evento.

Ayer la mayoría se encontró sin esperarlo con la primera fase del concurso morfológico de potros y potras, en el que se exhibieron los animales más jóvenes. La Plaza de España es la que acoge las tres pistas en las que se celebra el campeonato nacional de estirpe cartujana y el concurso morfológico Ciudad de Sevilla de pura raza española. Habrá también saltos en libertad de caballos angloárabes y cobras formadas por cinco yeguas. Mañana por la mañana se celebra el concurso de enganches, en el que el público podrá participar junto a quince carruajes en un paseo por el parque.

La entrada es gratuita y se han instalado unas gradas con capacidad para 800 personas. "Nuestro ánimo es que se convierta en un atractivo turístico y que se haga todos los años", explica José María Cruces, ganadero de caballos cartujanos. "Es importante reconocer el esfuerzo que hacen los ganaderos. Cualquier animal de los que hay aquí cuesta de cuatro millones para arriba. Los ganaderos exponen mucho dinero", advierte.

La muestra cuenta con un presupuesto de 270.000 euros, de los que el Ayuntamiento y la Diputación aportan 60.000 euros cada uno, y las cajas de ahorros El Monte y San Fernando, 150.000. La primera edición ha quedado incluida en el programa de las Fiestas del Corpus y el objetivo de los organizadores es que esto siga siendo así en los próximos años.

"Sicab [el salón Internacional del Caballo] es en noviembre y en estas fechas no hay nada parecido", apunta el ganadero Ángel Peralta, que está convencido de que cuando la cita se consolide serán muchos los turistas que intentarán programar su viaje a Sevilla coincidiendo con la cita. Peralta exhibe en la muestra a ocho de sus caballos y, además, pone todas las noches la guinda del programa.

Entre las 22.00 y las 0.00 el centro de la Plaza de España se convierte en el escenario de un espectáculo compuesto por fragmentos de varios. El cierre siempre es una de las piezas de Andalucía a caballo, el último montaje de Peralta, estrenado el año pasado en la Feria de Málaga, que ya se ha paseado por Francia y que después del verano se verá en Inglaterra y, probablemente, en estados Unidos.

La pieza que se representa mañana incluye flamenco en directo. La música es de Rafael Peralta y la letra de Ángel. Escribir es una de las pasiones del ganadero, autor de 200 sevillanas y varios libros. Ahora prepara una recopilación de sus poemas, a la que titulará Desde mi caballo. Y por la cabeza le ronda también la idea de editar una obra con sus "pensamientos". "Tengo más de 2.000", asegura. Y se lanza con algunos: "La uva pisoteada se venga con el borracho", "Torear es engañar al toro sin mentir"; "Esta vida es como un toro y el arte de vivirla es su lidia".