Cataluña está a la cola del gasto sanitario 'per cápita'

Cataluña es la quinta comunidad española con menos gasto sanitario per cápita. Ésta es la principal conclusión de un informe del Departamento de Salud en el que se compara qué invierte cada comunidad en este concepto, que en Cataluña representa un tercio del presupuesto de la Generalitat. El gasto sanitario por cada catalán fue, en 2003, de 884 euros, el 21% menos que en Cantabria y nueve euros por debajo de la media nacional. Con estos datos en la mano el Gobierno Catalán ha cerrado esta semana unos presupuestos en los que el gasto para este año se incrementará hasta los 926 euros por persona.

El informe interno del Departamento de Salud constata que no todas las comunidades invierten lo mismo en sanidad, aunque también se deriva que es muy difícil hacer una comparativa estricta entre todas las comunidades, ya que algunas de ellas tienen transferidos a los municipios determinados servicios que acaban siendo financiados por los ayuntamientos y no por las arcas autonómicas.

Pero el informe permite cifrar, ni que sea de forma aproximativa, algunos desequilibrios que los partidos de izquierdas ya denunciaron repetidamente mientras se encontraban en el banquillo de la oposición y que ahora, desde el Gobierno, pretenden eliminar.

Las comunidades con mayor gasto per cápita son, por este orden, Cantabria, La Rioja, Navarra y Extremadura. Estas comunidades invierten más de 1.000 euros anuales en la salud de cada uno de sus habitantes. En común tienen sus bajos índices de inmigración y es que ha sido precisamente la repentina llegada de extranjeros a determinadas zonas de España, entre ellas Cataluña, lo que ha contribuido a incrementar las diferencias entre comunidades.

En este momento, por ejemplo, el sistema sanitario catalán atiende a una población muy superior a los 6,3 millones de personas que figuran en el último censo. El número de tarjetas sanitarias entregadas por el Departamento de Salud -antes Sanidad- ascienden a 7,3 millones, y ésta es una cifra que no para de crecer con la llegada de ciudadanos extranjeros.

Cada mes, entre 7.000 y 12.000 inmigrantes reciben una tarjeta sanitaria. Entre enero y febrero de este año, por ejemplo, la recibieron 12.139 personas. Actualmente, 265.392 inmigrantes residentes en Cataluña poseen una, el triple que hace dos años.

El catedrático de Hacienda Pública de la Universidad Pompeu Fabra y experto en gestión sanitaria Guillem López Casasnovas tiene en cuenta las consecuencias de la inmigración pero considera "sorprendente" que el gasto per cápita de Cataluña en sanidad sea inferior al de Aragón, cuando muchos ciudadanos de esta comunidad utilizan servicios de Cataluña, sobre todo para tratamientos que requieren alta tecnología.

Por eso Casanovas mantiene que "las comunidades grandes forman a muchos de los médicos que ejercerán en otras comunidades y ofrecen servicios a ciudadanos de otras regiones, con lo que el gasto de Cataluña, por ejemplo, debería ser superior al de Aragón".

Este catedrático afirma, sin embargo, que las diferencias en el gasto sanitario por regiones son frecuentes en la mayor parte de los países y que este fenómeno tiende a acentuarse en aquellos estados más centralizados como Francia o el Reino Unido. "Entre Inglaterra e Irlanda del Norte, por ejemplo, el diferencial alcanza el 30%", explica a modo de ejemplo.

La tendencia que observa Lopez Casanovas va hacia un aumento de las diferencias entre comunidades. "Sin embargo, este diferencial va a favor de las comunidades más pobres, con lo que es fácil que las autonomías más ricas hayan sido las más beneficiadas por el estado de las autonomías. Y es que en la cola de la lista, recuerda este catedrático, se encuentran Cataluña, Madrid, Andalucía, Valencia y Baleares.

La consejera de Salud, Marina Geli, se ha comprometido repetidamente a incrementar el gasto sanitario a lo largo de esta legislatura para equipararlo, al menos, a la media española.

En los presupuestos hechos públicos esta semana para lo que queda de 2004, el gasto per cápita alcanza los 926 euros frente a los 884 del anterior ejercicio. Marina Geli, sin embargo, sigue viendo "insuficiente" esta cifra, aunque recuerda que este año la sanidad tendrá un incremento presupuestario cercano al 19%. "Y hemos logrado esto en un año de contención", añade.