Los jefes de Estado y representantes de las casas reales empiezan a llegar hoy a Madrid
El primero será el príncipe Naruhito de Japón, y Margarita de Dinamarca, la última
El príncipe Naruhito de Japón será la primera personalidad de alto rango que llegará a Madrid para asistir al enlace del príncipe de Asturias con Letizia Ortiz. Según los datos facilitados por el Ministerio de la Presidencia, Naruhito aterrizará hoy en el aeropuerto de Barajas a las 12.15. Margarita de Dinamarca será una de las últimas en llegar. Está previsto que la reina de los daneses venga en un avión privado hasta la base aérea de Torrejón. Lo hará mañana a las cinco de la tarde, con el tiempo justo de prepararse para asistir a la cena que los reyes de España ofrecerán en el palacio de El Pardo.
El Ministerio de la Presidencia facilitó ayer la relación de invitados de las casas reales y los jefes de Estado que estarán en Madrid para asistir al enlace. El aeropuerto de Barajas y la base de Torrejón se encuentran ya listos para recibir a los más importantes asistentes.
El príncipe Naruhito llegará hoy a Barajas al mediodía, y los príncipes Haakon y Mette-Marit, de Noruega, a primera hora de la tarde. También han anunciado su presencia Farah Diba, su hijo mayor y su nuera, así como las esposas de los presidentes de Bolivia, Colombia, Ecuador, Nicaragua y Perú, entre otros. El mayor número de invitados viajará mañana con el tiempo suficiente para asistir a la cena que los Reyes ofrecerán a 400 invitados en el palacio de El Pardo. Será el primero de los actos oficiales del enlace.
A Barajas llegarán mañana la reina Rania, de Jordania, y la reina Noor; los reyes Harald y Sonia, de Noruega, con la princesa Marta Luisa y su esposo; Constantino de Grecia, su esposa, Ana María, y todos sus hijos, y el Agá Khan; además del presidente de Colombia, la presidenta de Irlanda, el presidente de Nicaragua y el de El Salvador, el ex presidente de la República Checa Valclav Havel, el príncipe heredero de Abu Dabi y Nelson Mandela.
En la base aérea de Torrejón aterrizarán los aviones de la familia real belga, que llega al completo: los reyes Alberto y Paola; la reina Fabiola; el príncipe Felipe y su esposa, Matilde; la princesa Astrid y su esposo, Lorenzo, y el prínce Lorenzo y su esposa, Claire.
A la reina Margarita se la espera a las cinco de la tarde de mañana junto a su esposo, Enrique. Desde Luxemburgo, llegarán los grandes duques y cuatro de sus hijos. El príncipe Mulay Rachid representará a la casa real marroquí. La reina Beatriz de Holanda ha confirmado que llegará con el príncipe Jaime y la princesa Carolina, y el príncipe Constantin, con su esposa, Laurentin. La familia real británica ha delegado su presencia en el príncipe Carlos, que muy probablemente estará acompañado por su hijo mayor, Guillermo. Desde Suecia vendrán los reyes Carlos Gustavo y Silvia, y su hija, la princesa heredera Victoria. Para el viernes también han confirmado su presencia en Madrid el presidente de Alemania y el de Portugal.
Bahrein estará representado por los príncipes herederos; Qatar, por uno de los hijos del emir; Liechtenstein, por el príncipe Hans Adam; Mónaco, por los príncipes Alberto y Carolina, ésta acompañada por su esposo, Ernesto.
Ensayo con figurantes
En la catedral de la Almudena ayer hubo ensayo general. Pero los novios no se llamaban Felipe y Letizia. Se trataba de otra pareja que lo único que tenía en común con el Príncipe y su prometida era la estatura. Javier Montemayor, el realizador de TVE para la boda, trabajó toda la mañana con estos otros novios. Con ellos probó las luces y los diferentes planos que le pueden ofrecer las cámaras instaladas en el templo.
A la joven que hacía el papel de Letizia le colocaron una larga tela blanca que simulaba ser la cola del traje de novia diseñado por Manuel Pertegaz.
Este ensayo con figurantes sólo tuvo como protagonistas reales a los sobrinos del Príncipe y de Letizia Ortiz. De nuevo los pequeños acudieron a la Almudena para familiarizarse con el papel que tendrán el sábado. El de ayer fue su tercer ensayo y, aunque parece que los niños están más ambientados con su misión, de vez en cuando se despistan y rompen el orden del cortejo nupcial.
En los bancos en los que se sentarán los 1.400 invitados ayer se situó un grupo de figurantes, no tantos como los que habrá el sábado, pero sí los suficientes como para tener localizados a través de las cámaras a los más importantes. En algunos momentos de este ensayo general estuvo presente la reina Sofía, que por segundo día acudió a la catedral para supervisar los trabajos de decoración.
Este tipo de pruebas ya se realizaron en las bodas de las infantas Elena y Cristina. En aquellas ocasiones, Pilar Miró, encargada de la realización, recurrió a figurantes para probar las luces y las cámaras. Si la tradición de la boda de las infantas se cumple, en algún momento los verdaderos novios se acercarán al templo, no para ensayar, sino para ver en directo cómo se desarrollará la ceremonia y para que el realizador les dé alguna indicación.
En la catedral, cerrada al culto desde el lunes, también se ensaya estos días la música que sonará en la ceremonia. Todas las piezas han sido personalmente seleccionadas por la Reina, como hizo en las bodas de las infantas.
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