El 81% de los ciudadanos pide que se apruebe una ley de Igualdad de sexos

El 81% de los vascos considera que los grupos políticos deberían impulsar una ley de Igualdad de sexos en Euskadi, según los datos de un sondeo del Gobierno autónomo. Ese porcentaje se eleva hasta el 85% entre las mujeres y cae al 77% en el de los hombres. El lehendakari, Juan José Ibarretxe, se ha comprometido varias veces en los últimos años, la última el pasado 8 de marzo, a aprobar durante la presente legislatura una ley de Igualdad entre hombres y mujeres.

La encuesta, de la que informó ayer Vasco Press, fue realizada sobre una muestra de casi 3.000 personas entrevistadas el pasado mes de octubre.El sondeo permite confirmar la existencia de una percepción general de que las mujeres se encuentran discriminadas en el mundo laboral y deben hacer frente a muchas dificultades para compatibilizar el hogar, los hijos y un empleo estable. Una de las razones es que las mujeres continúan realizando en solitario o con escasa ayuda las tareas del hogar (comida, limpieza, atención a los niños,...). Sólo el 33% de las parejas afirma que comparten de forma equilibrada este trabajo, mientras que en el 63% de los casos es la mujer la que realiza todas o la mayoría de ellas.

Las respuestas varían según el sexo del encuestado. Entre los hombres, la opinión de que las tareas domésticas son compartidas crece al 39% (los propios varones reconocen en su mayoría que son las mujeres quienes hacen los trabajos del hogar), mientras que entre las mujeres se queda en el 26% de las entrevistadas.

La mayoría de ciudadanos cree que la desigualdad en el hogar se traslada también al terreno laboral. Ambos sexos comparten la opinión de que en un proceso de selección para un empleo donde compitan una persona de cada sexo el varón tendrá siempre más posibilidades de ser elegido. También es mayoritaria la opinión de que las mujeres afrontan más dificultades para encontrar un empleo ajustado a su nivel educativo (80% de los encuestados), tienen mayor riesgo de quedarse en el paro (79%) y sufrir marginación y explotación laboral (71%) y se ven muchas veces en la tesitura de elegir en su trabajo y tener hijos (61%).

Además de reclamar una ley de Igualdad, los ciudadanos apoyan de forma masiva la adopción de medidas dirigidas a que las empresas fomenten en su seno la igualdad, como, por ejemplo, la prohibición de recibir subvenciones a las compañías que discriminan a las mujeres. También son respaldadas aquellas para flexibilizar los horarios de trabajo, o aumentar las ayudas a las parejas con mayores a su cargo.

Respecto a las actitudes personales, las opiniones se dividen entre quienes afirman que los hombres deben dar el primer paso y cambiar para hacer desaparecer las diferencias entre sexos (42%) y quienes juzgan que la iniciativa debe ser compartida por hombres y mujeres. Sólo un 7% cree que las mujeres han de dar el primer paso.

El 60% de los entrevistados cree que las mujeres deben actuar conjuntamente para defender sus derechos, un 13% piensa que cada mujer tiene que llevar a cabo ese trabajo de forma individual y el 20% considera que las dos fórmulas son compatibles.