EE UU rodea de alambradas la ciudad rebelde de Faluya

Los marines intentan someter a la ciudad rebelde. Desde primeras horas de la madrugada de ayer, Faluya está rodeada de alambradas de espino y sólo se permite el acceso a los vehículos matriculados allí. Ha empezado la Operación Resolución Valiente, con la que las fuerzas estadounidenses intentan recuperar el control de la ciudad y castigar a los responsables del brutal asesinato de cuatro guardaespaldas norteamericanos el pasado miércoles.

"Nuestro objetivo está claro, queremos capturar a los hombres que buscamos. No deseamos ir y disparar a voleo", declaró el teniente James Vanzant a un pool de periodistas. Nadie sabe cuántos días va a durar la operación, la mayor emprendida desde la caída del régimen de Sadam el año pasado. Los militares han preparado campamentos para albergar a los detenidos y a los civiles que puedan escapar de los combates.

Antes de que amaneciera ayer, las posiciones de los marines fueron atacadas con morteros y lanzagranadas. Algunos residentes declararon que se habían producido los primeros intercambios de fuego, y fuentes médicas hablaban de cinco muertos y tres heridos en el hospital local.

1.300 soldados

"Un total de 1.300 soldados de las fuerzas de la Coalición se han desplegado para cercar Faluya", informó por la tarde el general norteamericano Mark Kimmitt, director adjunto de operaciones. Kimmitt subrayó que, junto al Primer Cuerpo Expedicionario de Marines, también participan unidades del nuevo Ejército iraquí y del Cuerpo de Defensa Civil. Es la primera vez que se menciona la participación de los soldados iraquíes en una misión de este tipo. La Coalición insiste mucho en el trabajo de las fuerzas de seguridad locales, cuya preparación es puesta en duda ante la proximidad del traspaso de soberanía el próximo 30 de junio.

La operación de sellado de Faluya incluye el toque de queda de siete de la tarde a seis de la mañana, según un comunicado difundido en la ciudad. También se pide que quienes pertenezcan a algún servicio de seguridad iraquí "permanezcan en uniforme". Residentes contactados por teléfono han informado de que las escuelas y las tiendas están cerradas y que las calles permanecen desiertas.

En las horas previas al asalto, las fuerzas norteamericanas cortaron el tráfico en las dos carreteras que rodean esta ciudad suní, y que son la principal arteria que comunica Irak con Jordania. La autopista permanecerá cortada al tráfico "hasta nueva orden".