La comisión europea sobre el 'Prestige' critica la gestión del Gobierno

Críticas al Gobierno español por no haber concluido las investigaciones sobre "las causas y las circunstancias" del accidente del Prestige tras un año y medio y malestar por el juicio del comisionado español de que se tomarían las mismas medidas en otro siniestro similar. Éstas son algunas de las conclusiones del informe aprobado ayer en una comisión ad hoc del Parlamento Europeo creada en septiembre con la oposición de los eurodiputados populares españoles.

El documento, que pide también suavizar las sanciones contra el capitán del barco, fue aprobado por 25 votos a favor, uno en contra y 16 abstenciones. Éstas vinieron en su mayoría del Grupo Popular. El texto, que pasa ahora al pleno de la Eurocámara para su votación en la sesión del 19 al 22 de abril, se felicita, no obstante, de "la reducción de las fugas de petróleo de los restos del Prestige y de los planes concretos para garantizar la seguridad de dichos restos", pero critica que todavía "no se han concluido o publicado todas las investigaciones acerca de las causas de la catástrofe".

Asimismo, pide a las autoridades españolas proseguir los esfuerzos para eliminar el problema del fuel aún presente en el mar y les urge a presentar "un calendario detallado para la extracción y tratamiento" del combustible aún no recuperado. Las operaciones para la extracción del fuel del casco mediante un sistema de bolsas lanzaderas está previsto que se inicien a finales de este mes o principios del próximo y concluir en otoño, según la compañía petrolera Repsol, encargada de dirigir las tareas de recuperación.

"Es fundamental ocuparse del pecio", declaró ayer el ponente del informe, el liberal belga Dirk Sterckx, al alertar que podría haber todavía unas 20.000 toneladas de carburante perdidas, con el riesgo de grave amenaza para la costa que eso comporta.

El documento expresa igualmente malestar por la declaración del comisionado español, Francisco Uría Fernández, ante la comisión de que en idénticas circunstancias a las de esta catástrofe, el Gobierno repetiría "la decisión de alejar el buque de la costa". Advierte igualmente del impacto del vertido en las pesquerías de la zona y del peligro que a medio y largo plazo surjan efectos negativos en los recursos pesqueros y en la rentabilidad del sector. Respecto al capitán del petrolero siniestrado, Apostolos Mangouras, los eurodiputados piden a las autoridades judiciales españolas que flexibilicen su situación.

La comisión, en un juicio más general, reclama una investigación sobre los efectos de la catástrofe a largo plazo en el medioambiente y la cadena alimentaria. Además, solicita a cada país de la Unión Europea que establezca una estructura clara de toma de decisiones y órdenes ante emergencias en alta mar, así como una autoridad con competencia y experiencia necesarias a la hora decidir.

"El resultado final no es insatisfactorio, pero sí mejorable", declaró a la agencia Efe el presidente del Grupo Popular español en la Eurocámara, Gerardo Galeote. Criticó, sin embargo, la "alarma injustificada" que el informe podría sembrar sobre las playas y la pesca gallega. Los populares españoles justificaron su abstención en la referencia sobre la disminución de capturas y en el insuficiente llamamiento a que se refuerce más la seguridad marítima.

La socialista Rosa Miguélez, vicepresidenta de esa comisión que ha tenido carácter temporal, criticó la abstención del PP y opinó que con este informe "se abre un camino de futuro en la mejora de la seguridad marítima". Camilo Nogueira, del Bloque Nacionalista Galego, saludó "el paso adelante" para Galicia.