Inventos bajo tierra

Profesores del grupo de investigación de Ingeniería Rural de la Universidad de Almería han conseguido la patente de una máquina que mide la resistencia a la penetración de los suelos agrícolas. El artefacto, empleado únicamente en cultivos extensivos, orientará a los agricultores sobre el estado de la superficie para realizar determinadas operaciones: siembra, uso de aperos o tránsito de máquinas.

La máquina, a diferencia de las anteriores existentes, disminuye el margen de error al contar con un motor eléctrico y eliminar la fuerza manual. A los profesores Diego Luis Varela Martínez, Jesús Gil Ribes y Juan Agüera Vega les ha preocupado siempre la compactación de los suelos en el Sur de España, sobre todo en provincias como la cordobesa.

Allí, la recogida de aceituna coincide con la época de lluvias y el paso de tractores aumenta la compactación del terreno. "Esa compactación disminuye la infiltración de agua, dificulta el desarrollo de las raíces y hace que, cuando llueve, se pierda suelo fértil", explica el profesor Varela, director del grupo de investigación de Ingeniería Rural de la UAL.

La invención se vale del índice de cono (el parámetro con que se mide la resistencia al suelo) para examinar el estado de la superficie. "En función de esos resultados que varían de escala según el tipo de suelo, un agricultor sabrá determinar el daño que provocan las máquinas en sus terrenos, cuándo es mejor que pase un vehículo por ellos o qué estrategias de tráfico controlado puede llevar a cabo, como procurar que los vehículos de tracción pasen siempre por el mismo lugar", apunta Varela.

La máquina, que estos días ensaya mediciones en Córdoba, requiere de un ordenador que gestiona el ensayo aunque la intención de sus creadores pasa por abaratar su construcción para hacerlo asequible al agricultor. "Si en lugar de insertar componentes electrónicos se insertan otros, la máquina saldrá más barata. No es necesario un salto tecnológico ni de conocimiento para emplear este aparato", describe Varela. La máquina (penetrómetro) utiliza un motor eléctrico para clavar el vástago a velocidad constante en el suelo. Mediante una célula de carga y un sensor potenciométrico se registra en cada punto la fuerza necesaria para introducir la punta cónica en el suelo.

El grupo de investigación de Ingeniería Rural de la UAL, que trabaja con otros proyectos, ha solicitado también la patente de otra máquina diseñada únicamente para invernaderos, con la que se ensayan las cimentaciones aplicadas a estas construcciones ligeras. Esta última invención responde a los problemas generados por la estructura de los invernaderos, que no son resistentes a la fuerza de tracción que ejerce el viento sobre ellos. "Hasta ahora no existe ningún procedimiento de cálculo para esfuerzos de tracción, de ahí la importancia que tiene esta máquina", constata el profesor Varela. Este último invento ha propiciado el desarrollo, con cálculo numérico, de varios modelos sobre cómo se comporta cada tipo de cimentación.

La máquina diseñada permite que se ensayen las cimentaciones independientemente del método de instalación de la misma en el terreno. "De este modo, en una misma parcela donde se observa una variabilidad espacial del terreno y por tanto de su capacidad resistente, permitiría realizar varios ensayos en el mismo día, por lo que, en general, representa una ahorro económico y de tiempo. Y se puede acceder a cualquier parcela donde vaya a construirse el invernadero", resume Valera.

El fin no es otro que luchar contra uno de los mayores enemigos de los agricultores en Almería: el viento, ya que ensaya la cimentación por tracción y cuánto se desplaza el invernadero u otra construcción ligera. Actualmente, las mediciones no se calculan adecuadamente mediante fórmulas aproximativas y los resultados, a veces, son hasta 18 veces inferiores (dependiendo del tipo de suelo) al que realmente pueden soportar. Es por ello que se aconseja su ensayo en el campo y el utensilio diseñado por al UAL es fácilmente transportable, ya que se engancha al tripuntal trasero del tractor. La UAL está realizando prácticas con el aparato en varios invernaderos de Almería.