Dos de cada tres italianos quieren el regreso de sus tropas

Un 67% de los italianos, dos de cada tres, se declaran partidarios de que sus soldados abandonen Irak el 30 de junio "si la situación no cambia", según un sondeo de urgencia publicado ayer por el diario La Repubblica. El 26% de los consultados consideraron que las tropas debían continuar su misión en territorio iraquí, y un 7% no respondió. El sondeo se realizó el lunes entre 1.150 personas y la empresa que lo confeccionó, Eurisko, lo definió como "una instantánea en la que pesaba indudablemente el anuncio efectuado ese mismo día por el nuevo Gobierno de Madrid".

Una portavoz de Eurisko señaló que la opinión de los italianos no era estática e hizo notar que en marzo, meses después de que el atentado contra la base militar de los carabineros en Nassiriya, con 18 muertos, disparara el patriotismo y la popularidad de la llamada Operación Babilonia, otro sondeo similar realizado por la misma empresa reflejó que una ligera mayoría de los italianos (52%) estaba a favor de seguir en Irak.

El Gobierno de Silvio Berlusconi, por su parte, reafirmó ayer el propósito de mantener a sus 3.000 militares en sus bases del sur de Irak, aunque el ministro de Asuntos Exteriores, Franco Frattini, matizó que en caso de que el 30 de junio los españoles se retiraran sin que se hubiera producido un traspaso de poderes a la ONU, "se discutiría la situación" del contingente italiano.

Comprometida a fondo

"Italia ha decidido comprometerse a fondo para que desde el 1 de julio exista un Gobierno iraquí legítimo, y trabaja con energía para que Naciones Unidas asuman un papel importante en el proceso de transición. El Gobierno de Berlusconi ha asumido esa responsabilidad y no piensa cambiar", declaró Frattini a La Repubblica. "Seguimos en Irak, no damos marcha atrás, ¿por qué deberíamos hacerlo", añadió el ministro. "La situación iraquí no tiene ninguna relación con los atentados terroristas; Italia, como todos los países del mundo, está en el punto de mira. Desde el 11 de septiembre de 2001, todos estamos en el punto de mira", explicó, citando como ejemplos los ataques de extremistas islámicos en Bali y Casablanca.

Una fuente del Gobierno italiano comentó que la situación española era ligeramente distinta desde el principio porque Madrid disponía de un voto en el Consejo de Seguridad de la ONU en los meses previos a la invasión de Irak, con el que respaldó la invasión, y "se alineó públicamente con las fuerzas invasoras" en reuniones como la celebrada en Azores hace un año. "La de Italia es una misión de paz como otras y se mantiene sin cambios", añadió la misma fuente.