Buenos Aires da bien en pantalla

La reactivación de Argentina ha comenzado por las provincias, donde la agricultura, la ganadería y algunas industrias habían sido los sectores más afectados por la crisis. Sin embargo, en Buenos Aires también han florecido negocios al compás del cambio. Es el caso de la industria audiovisual. En 2003 se rodaron 650 producciones cine, televisión y publicidad, un 40% más que en 2002.

Las productoras y las agencias de publicidad ya habían conseguido captar clientes del exterior en los noventa, cuando los costes eran los más elevados de Latinoamérica. Telefónica compró Patagonik Films y el canal Telefé, que se ha convertido en la tercer productora de la región. Y el grupo Árbol, propietario de Globomedia, adquirió Promofilm. La mayoría de las agencias de publicidad locales se integraron en redes internacionales. Desde la década pasada, Argentina se destacó por la originalidad de sus anuncios, películas y programas de televisión y comenzó a exportarlos. Lo sigue haciendo, sólo que el nuevo tipo de cambio ha reducido los costes un 50% y la rentabilidad ha aumentado.

El presidente de la agencia Nazca Saatchi & Saatchi, Pablo del Campo, recuerda que en los noventa los publicistas argentinos ganaron sus primeros premios internacionales. "En 1999 nos asociamos a Saatchi & Saatchi y empezamos a hacer trabajos para Procter & Gamble para Latinoamérica. Pero con la crisis la demanda local se cayó y con la devaluación aumentamos los trabajos para afuera", explica Del Campo. En los tiempos de la economía dolarizada, el 20% de la facturación de su agencia provenía de la exportación. Hoy representa el 60%. "La producción que en México cuesta un dólar, aquí vale 60 centavos", ejemplifica el publicista.

La demanda de producción publicitaria de Argentina desde Estados Unidos y Europa ha crecido tanto que existen listas de espera. De todos modos, Del Campo considera que no es sólo una cuestión de precios. "En Argentina", dice, "tenemos la ventaja de que hay un consumidor que le encanta la publicidad y eso nos lleva a tener buena calidad. Somos flexibles porque estamos acostumbrados a trabajar en un contexto de inestabilidad y por eso hacemos en un mes lo que en Nueva York llevaría cuatro", advierte el presidente Nazca Saatchi & Saatchi.

La gerente de contenidos de Promofilm Internacional, Marcela Campos, insiste en que la exportación de formatos y producciones televisivas comenzó hace tiempo, pero admite que hace dos años "se aceleró mucho". El sector audiovisual aprovechó los tiempos en que el peso valía lo mismo que el dólar para importar equipos de última tecnología. Ahora saca ventaja de costes de producción entre un 30% y un 50% menores a los de México, Estados Unidos y Europa, según Campos.

Capital humano

Todos los participantes de la industria destacan el capital humano, pero Diego Guebel, uno de los socios de la productora Cuatro Cabezas, creadora de Caiga quien caiga, lo explica: "Especialmente en Buenos Aires tenés una clase media con buena formación. Es gente que desde hace años tiene acceso a la televisión por cable, muy desarrollada en el país, y eso la hace permeable a distintos contenidos". Y destaca la posibilidad de probar ideas en el mercado argentino para después comercializarlas cruzando las fronteras. Su productora produce para las cadenas norteamericanas HBO, TNT y Fox.

El cine argentino también está generando buenas ganancias. Nueve Reinas y El hijo de la novia se han vendido a una treintena de países. Nueve Reinas recaudó en Estados Unidos 1,2 millones de dólares en 2002.