Schröder mide hoy sus fuerzas en las elecciones de Hamburgo

Las elecciones en la ciudad-Estado de Hamburgo, donde hoy están convocados a votar 1,2 millones de ciudadanos, constituyen una prueba con fuego real para el canciller socialdemócrata Gerhard Schröder tras su dimisión de la presidencia del SPD y la entrada en vigor de sus reformas sociales. Los sondeos colocan a la democracia cristiana (CDU) en solitario al borde de la mayoría absoluta. No obstante, los socialdemócratas (SPD) junto con la Lista Verde Alternativa (GAL) también cuentan con posibilidades de conseguir la mayoría para gobernar.

La de hoy en Hamburgo es la primera estación de un largo camino del calvario para Schröder y el SPD que en este 2004 afrontan con un negro horizonte demoscópico cinco elecciones en Estados federados, ocho municipales y las europeas. El parte meteorológico, con los vientos que soplan desde Berlín, no augura nada bueno para el SPD de Hamburgo. Los sondeos le pronostican el peor resultado desde que en 1946 se votó por primera vez en la ciudad hanseática del norte de Alemania.

Feudo socialdemócrata

A pesar de estos negros augurios, la aritmética electoral podría esta noche ofrecer un resultado que lleve al SPD de nuevo al Gobierno de Hamburgo. Esta ciudad siempre fue un feudo de la socialdemocracia que la gobernó 44 años seguidos hasta que en 2001 la CDU, aliada con la ultraderechista Iniciativa por el Estado de Derecho (PRO) y los liberales (FDP), sacaron al SPD del poder. La alianza con PRO, que dirige el juez ultraderechista Ronald Barnabas Schill, que en 2001 consiguió un 19,4% de votos, acabó como el rosario de la aurora. Schill sacó casi a patadas del armario al alcalde Ole von Beust (CDU), un abogado de 48 años, al que acusó de mantener una relación homosexual con su ministro de Justicia. La homosexualidad, sin embargo, no ha perjudicado a Von Beust en una ciudad abierta como Hamburgo. Su popularidad ha subido como la espuma hasta el 45% o más, que ahora le pronostican los sondeos.

Se beneficia Von Beust del viento que sopla en toda Alemania en contra de Schröder y del Gobierno de Berlín, muy golpeado por los desastres en la gestión y la fallida puesta en marcha de las reformas aprobadas a final de año, que rascan el bolsillo de los pensionistas y usuarios de la seguridad social.

La CDU ha montado toda su campaña en torno al popular alcalde. Von Beust ha conseguido hacer olvidar el desastre de la coalición con el juez ultraderechista que obligó a disolver el Parlamento de Hamburgo antes del final de la legislatura y a la convocatoria anticipada de las elecciones de hoy.

El contrincante socialdemócrata del popular alcalde es Thomas Mirow (SPD), un licenciado en políticas de 51 años que inició su carrera como jefe de gabinete del legendario Willy Brandt al que sirvió con devoción durante años hasta que se estableció en Hamburgo.