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Reportaje:

"¿Tiene cartón?, somos del Ayuntamiento"

Fuenlabrada pone en marcha de forma experimental un servicio de recogida de papel 'in situ' en los comercios

Los comerciantes de Fuenlabrada ya no tienen que preocuparse con los cartones que desechan. Ahora un camión los recoge de sus puertas a partir de las siete de la tarde para evitar que la suciedad se acumule en las calles y que se saturen los contenedores de reciclaje. Los responsables de la mayoría de las tiendas están muy satisfechos con la iniciativa, aunque después de más de un mes en funcionamiento, hay quien todavía no lo sabe.

El Ayuntamiento de Fuenlabrada y Aspapel (Asociación Española de Fabricantes de Pasta, Papel y Cartón) han puesto en marcha este proyecto de recogida complementaria, "Tu papel es importante", cuyo propósito es evitar que las cajas que producen las tiendas no saturen los contenedores de reciclaje y mejorar así la limpieza de las calles, además de preservar el medio ambiente.

El embalaje de un frigorífico ocupa en el contenedor lo mismo que los desechos de un bloque de viviendas

De lunes a sábado, tres operarios recogen con un camión compactador de carga trasera -reduce el volumen de las cajas, incluidas las de plástico- los restos de cartones y papeles que producen los más de 300 negocios de la localidad. "No es un camión habitual, que llenaríamos muy pronto, tiene una maquinaria que prensa los residuos y nos permite recogerlo todo en dos o tres horas", asegura el jefe de reciclaje de Aspapel, David Barrio.

"Estamos muy satisfechos porque ya no tenemos que preocuparnos por llevar al contenedor las cajas", comenta un responsable de un comercio de electrodomésticos, que cree que sería una buena idea que se continuara con el servicio.

Mónica, la encargada de la tienda de ropa Metro en la calle de Leganés, afirma que ha recibido una información detallada acerca de la recogida, y lo considera una buena opción, aunque de momento, confiesa, no lo ha utilizado: "Cuando llegue la ropa nueva ya lo usaremos, porque nos facilita la tarea de acercar las cajas a la basura".

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El camión de recogida realiza una ruta por las calles más comerciales de Fuenlabrada: de Leganés, Luis Sauquillo, avenida de Portugal, avenida de la Comunidad de Madrid y avenida de Europa. De esta forma se evita que los contenedores destinados al reciclaje de papel y cartón, los de color azul, se llenen con poca cantidad. "Hay cajas de gran volumen, como las de un frigorífico, que ocupan un espacio destinado al reciclaje de papel de las viviendas", explica Barrio.

Esta iniciativa ha tenido una buena acogida entre los comerciantes, aunque hay algunos que a pesar de conocer este servicio, prefieren seguir con el método tradicional: acercarlo ellos mismos al contenedor. "Como tenemos al lado uno de los contenedores azules, y tampoco generamos tanta cantidad, lo tiramos nosotros", asegura la encargada de una boutique de señoras de la calle de Leganés, que achaca a una cuestión de "despiste" el que no dejen los cartones en la puerta: "No nos acordamos y llevamos las cajas poco a poco".

En una tienda de textil de la localidad no hacen uso del servicio, porque un chico pasa a recogerlas a diario. Hay variedad en las formas.

Esmeralda, la encargada de un comercio de electrodomésticos, comenta que no ha visto pasar el camión por la zona, y que los comercios de su alrededor tampoco lo dejan: "Me parece una buena opción útil para nosotros, pero no es estético dejar la basura en la puerta", dice, "nosotros ahora estamos de reformas y lo llevamos todo al contenedor".

El proyecto de recogida, que se puso en marcha el 29 de diciembre para ayudar al servicio durante los días de Navidad, se desarrollará inicialmente durante tres meses. El coste, que todavía no está valorado, correrá a cargo de Aspapel. Esta asociación pretende obtener información relevante sobre la recogida de papel que pueda aplicarse a otros municipios: "Cuando finalice este proyecto, elaboraremos un manual con recomendaciones técnicas y logísticas para conseguir que esta iniciativa sirva de referencia en otros lugares".

Hasta la puesta en marcha de este sistema de "recogida complementaria a la habitual", los vecinos acudían con sus bolsas de papel para reciclar y no podían o encontraban dificultades para depositarla en el contenedor debido al volumen de papel que dejan los comerciantes. "Los contenedores azules estarán aliviados del cartón del pequeño comercio y los ciudadanos tendrán más espacio disponible para depositar los papeles del hogar: periódicos, revistas, propaganda, cajas...", asegura David Barrio.

Los vecinos piden más colaboración

El proyecto piloto de recogida de cartones en los comercios está teniendo una buena acogida también entre los vecinos de Fuenlabrada, que ven cómo los contenedores destinados al reciclaje de papel están menos saturados, al menos en la zona aledaña a la calle de Leganés.

"Ahora puedo verter mis papeles sin problema. Antes resultaba bastante complicado porque siempre estaba lleno", afirma Concepción, vecina de la zona. Sin embargo, se queja de que debajo de su vivienda los comerciantes de un mercadillo "dejan tiradas todas las cajas y da una imagen lamentable".

Aspapel pretende desarrollar proyectos similares de recogida puerta a puerta en domicilios y oficinas como complemento al contenedor azul. "Sería una buena idea", asegura Juan, un vecino de Fuenlabrada, que cree que el problema está en la falta de colaboración de los ciudadanos: "Entre todos tenemos que cuidar que esté limpia la localidad".

Mari Cruz, que vive en la calle de Luis Sauquillo, no ha notado "especialmente" que los contenedores azules estén menos llenos. Asegura que en su puerta hay uno de ellos, pero que "casi siempre está rebosando". Entonces acude al que está situado en la acera de enfrente, que suele presentar el mismo aspecto. "Hay veces que tengo que dejarlo en el suelo, al lado del contenedor", dice. Natividad, residente también en Luis Sauquillo, hace otra valoración: "No tengo problemas para dejar mis papeles. Lo suelen vaciar con mucha frecuencia".

David, un joven ecologista de la zona, cree que el problema no radica en la falta de contenedores: "Todavía hay gente que no se hace cargo de que hay que separar la basura".

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