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Euskadi registra la muerte de un obrero cada dos días laborables

Los accidentes laborales ocasionaron 105 muertes en Euskadi durante el pasado año, lo que supone casi un fallecimiento por cada dos días laborables. La siniestralidad crece por segundo año consecutivo tras la bajada de 2001, cuando se redujeron a 98 los accidentes de trabajo mortales. Comisiones Obreras censuró ayer, al cumplirse ocho años de la entrada en vigor de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, que para las empresas resulta más barato infringir las normativas de seguridad que cumplirlas.

Desde 1995 se han registrado en el País Vasco 957 muertes de trabajadores en sus puestos o en los trayectos de ida o vuelta, lo que supone una media de 106 anuales. La cifra máxima se alcanzó en 1999, con 121, y la mínima fue de 87 en el ejercicio de 1997. En estos nueve años, el número de accidentes laborales ha superado los 920.000, según los datos aportados ayer por el sindicato. La cifra de siniestros sí bajó el pasado año, con un total de 111.493, frente a los 116.322 registrados en 2002, la más alta de estos últimos nueve años junto a la del ejercicio de 2001 (116.378 siniestros).

Jesús Uzkudun, responsable de Salud Laboral de CC OO de Euskadi, dijo que estos datos reflejan que "somos la vergüenza europea", porque la comunidad vasca "no se diferencia lamentablemente del resto del Estado y casi doblamos las tasas de la UE". Uzkudun valoró que la reducción de los accidentes laborales el pasado año contrasta con el crecimiento de los siniestros en el trayecto al trabajo, en la construcción -23 muertos frente a los 15 de 2002 - y de enfermedades profesionales.

Baremo congelado

Esta central sindical abogó por la creación del delegado sectorial de prevención que visite las obras y exija el cumplimiento de la normativa. Culpó a las empresas y la mutuas de no declarar incapacidades temporales y permanentes o enfermedades profesionales y criticó que cataloguen como leves determinadas lesiones que "derivan en incapacidad permanente y que deberían ser calificadas graves".

Junto a ello resaltó la congelación, desde 1991, del baremo que se paga por las secuelas de un accidente laboral, frente a las actualizaciones que se realizan, por ejemplo, en los siniestros de tráfico. "La única carne cuyo precio no ha subido desde 1991 ha sido la del currela", dijo el responsable de Salud Laboral.

Confebask rechazó que Euskadi sea la "vergüenza europea" en materia de seguridad y alegó que los datos no están homologados. "Aquí se incluyen entre las muertes las que se producen in itinere [durante el trayecto] o los cardiovasculares", afirmó un portavoz. Agregó que la seguridad es un asunto que "no está en la cultura de la sociedad española, como lo demuestran los accidentes en la carretera" y valoró que las últimas sentencias "que han imputado las causas [de los siniestros] al trabajador" evidencian que es "una labor de todos".

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