El hospital Peset de Valencia aplica una nueva técnica en la rotura de un aneurisma de aorta

El 90% de los pacientes con aneurismas de aorta rotos muere de forma casi instantánea y del escaso porcentaje que llega a los hospitales, sólo un 50% sobrevive, según Eduardo Ortiz, jefe del servicio de cirugía vascular y endovascular del hospital Universitario Doctor Peset. Para elevar esta tasa, el centro valenciano emplea una nueva técnica mínimamente invasiva que consiste en aplicar a los enfermos que llegan al hospital tras sufrir la rotura unas prótesis que se introducen a través de pequeñas incisiones en las arterias femorales.

El aneurisma es un ensanchamiento de la pared de una arteria debilitada, que crece por la presión de la sangre bombeada de forma que se crea una especie de globo. Se suelen localizar en la aorta, la arteria más grande del organismo, y en un 80% de los casos se sitúa en el abdomen, entre los riñones y las arterias de las piernas. Con el paso del tiempo la inflamación crece, las paredes vasculares cada vez son más débiles y aumenta el riesgo de rotura. Si el aneurisma es pequeño, se suele seguir la evolución mediante ecografías. Pero si es grande, se expande o su localización es peligrosa, el tratamiento tradicional consiste en sustituir la porción de la arteria dañada por otra arteria artificial de material sintético para evitar la rotura y una hemorragia fulminante a la que sólo sobrevive el 10% de los pacientes.

Generalmente esta intervención se hacía operando al paciente y sustituyendo el tramo afectado por otro artificial. Desde hace cinco años, se ha comenzado a aplicar otra técnica, menos agresiva, que consiste en introducir en las arterias femorales unos catéteres que llevan una prótesis plegada y que se introduce remontando los vasos sanguíneos de las extremidades hasta que llegan a la zona dañada donde se despliegan, se anclan y toman la forma original de la arteria. El aneurisma permanece, pero la sangre circula por el interior de la prótesis, evitando la posibilidad de hemorragia.

La novedad de la técnica del equipo de cirugía vascular del hospital Peset es aplicar este sistema no ya en aneurismas en situación delicada, sino una vez ya rotos, gracias a la experiencia adquirida y los protocolos desarrollados. Ortiz destaca los excelentes resultados obtenidos en tres pacientes que fueron dados de alta entre dos o tres días después de esta intervención, mediante operaciones con anestesia local y con una estancia en la unidad de cuidados intensivos que no supera las 24 horas.

"Con la técnica convencional se tenía que abrir el abdomen y sustituir la aorta rota por una prótesis de material sintético, lo que suponía una intervención muy grave", señala el jefe de servicio del hospital valenciano. De hecho, la mayoría de los pacientes -casi todos hombres- tienen más de 60 años, por lo general son fumadores, hipertensos y muchos de ellos diabéticos o con otras complicaciones, lo que hace aún más delicada la operación de cirugía abierta con la aorta rota. "La intervención que ha comenzado a practicar el hospital Peset por primera vez en el país supone un paso adelante de gigante, ya que hasta ahora era muy difícil disminuir la mortalidad en estos pacientes", señala Ortiz.