Fervasa pedirá a Quart legalizar la obra irregular de la planta de basura

La empresa Fervasa, que gestiona el tratamiento de las basuras del área metropolitana de Valencia, pedirá al Ayuntamiento de Quart de Poblet -donde está situada en su mayor parte- la legalización de las obras de ampliación realizadas sin las licencias preceptivas, como establece una sentencia del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 4, que confirma un decreto municipal de julio de 2002 de paralización de las instalaciones abiertas de forma irregular.

"La planta de Fervasa no se va a cerrar porque tiene licencia de actividad desde 1971", aseguró ayer la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, quien no obstante, reconoció que no se pidió el permiso de obras para una nueva nave de tratamiento y un edificio de oficinas en 2000, durante la etapa de liquidación del Consell Metropolità de l'Horta (CMH), eliminado por el PP. Según Barberá, "se está hablando con Quart para legalizar la obra" y se pedirá "la suspensión temporal de la ejecución de la sentencia" -que afectaría a una parte de la planta donde se tratan 300 toneladas de residuos diarios- mientras se soluciona el caso. La alcaldesa no aclaró si se recurrirá la sentencia. Fervasa es propiedad de la Entidad Metropolitana de Tratamiento de Residuos (Emtre) -heredera del desaparecido CMH- y está integrada por 47 municipios, entre ellos Valencia, que mantiene la mayor participación y el control de la presidencia, en manos de la concejal María Jesús Puchalt.

Malos olores

El Ayuntamiento de Quart de Poblet decretó en julio de 2002 la paralización de unas obras de ampliación de Fervasa y el cese de actividad, concediendo un plazo para su legalización. La sentencia rechaza el recurso de la empresa y señala que "no cabe duda" de que Fervasa "ha ampliado las instalaciones y desarrolla en las mismas actividad no amparada por la licencia otorgada en 1971, no habiendo obtenido tampoco autorización alguna para la ejecución de dichas obras".

La alcaldesa de Quart, Carmen Martínez, del PSPV, afirmó ayer que la sentencia supone "el reconocimiento" de las denuncias que desde hace años plantean los vecinos por malos olores e insalubridad en una planta saturada cuya sustitución no arrancará antes de abril. "Una vez más queda patente la nefasta política del PP, que no ha resuelto el problema del tratamiento de residuos", dijo Martínez, quien ha encargado un informe jurídico sobre la situación de Fervasa tras este fallo. "Espero que esta sentencia sirva para que la presidencia del Emtre y la empresa Fervasa legalicen la planta con el fin de que se puedan aplicar medidas correctoras necesarias", añadió Martínez, quien insistió en que la licencia de actividad para la ampliación es necesaria, al contrario de lo dicho por Barberá, además de la de obras. El Bloc pidió el cierre de la planta sin demora.

Fervasa ya ha sido condenada a pagar a Quart una sanción de 18.030 euros, y de 3.005 euros a Aldaia, cuyo término también ocupa y que está pendiente de que los tribunales se pronuncien sobre su petición de cierre de la planta.