_
_
_
_

Los tres escándalos de Sharon

El líder de la oposición, Simón Peres, pidió a Sharon que comparezca públicamente para dar explicaciones sobre los tejemanejes financieros que le permitieron hacerse con la jefatura del Likud en 1999 y, posteriormente, con la del Gobierno en 2001. Otros laboristas demandaron su dimisión. Entre ellos, el ex ministro de Hacienda Abraham Shohat, quien señaló que las sospechas de corrupción en el entorno de Sharon "están contaminando la atmósfera". El actual responsable de Justicia, Yossef Lapid, salió en defensa de la presunción de inocencia del primer ministro, pero también le llamó "a extraer las conclusiones necesarias".

Lapid, que lidera el partido Shinui, dio así a entender que si las acusaciones se concretan, Sharon debería quedar al menos suspendido de sus funciones ejecutivas hasta que haya una sentencia firme. Pues además del llamado caso de la isla griega, se encuentra supuestamente involucrado en otros dos episodios de corrupción. El primero, por la presunta creación de empresas tapadera junto al gerente del Likud, Uri Shani, para canalizar las otras donaciones recibidas desde el extranjero para financiar sus campañas electorales.

Al segundo episodio, íntimamente relacionado con el anterior, se le conoce popularmente por el caso Kern y sigue siendo investigado por la unidad antifraude de la policía. Hasta el momento se sabe que en la primavera de 2002 un millonario surafricano, Cyril Kern, amigo de la familia, les concedió un préstamo de 1,5 millones de euros, que sirvió a Sharon para pagar las deudas contraídas durante sus campañas electorales.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_