Una enmienda del PP establece nuevos criterios de representación en las cajas

El Partido Popular presentó ayer una enmienda a la Ley de Órganos Rectores de las Cajas de Ahorros para modificar el sistema de representación de los miembros de la Asamblea General, que son los que posteriormente eligen el consejo de administración. El PP modifica así una enmienda suya anterior porque carecía de precisión, según este partido. Este capítulo ha sido el caballo de batalla con CiU y el PNV, incluso con el PSOE, que advirtieron que recurrirían al Constitucional si se vulneran las competencias autonómicas.

Hasta ahora existía una preponderancia de representantes de los ayuntamientos y clientes de la comunidad autónoma de origen de la caja. Según la enmienda del PP, en el futuro los miembros de los ayuntamientos e impositores se elegirán "en observancia del principio de igualdad, proporcional a la cifra de depósitos entre las diferentes comunidades autónomas en que tenga abiertas oficinas, dentro del porcentaje atribuido a cada uno de ellos".

Legislación autonómica

La enmienda excluye de esta obligación a los otros tres grupos que están representados en las cajas, como son las comunidades, las entidades fundadoras y los empleados. Fuentes del PP aclararon ayer que no se vulnera ningún principio autonómico porque se añade que "la legislación de desarrollo se ajustará en todo caso a lo establecido en este artículo". También insistieron en que "sólo se quiere evitar la injusta representación de la Ley Vasca de Cajas, donde predomina la representación de los ayuntamientos y clientes del País Vasco".

Por su parte, CiU presentó otra enmienda diferente al PP donde dice que "la normativa autonómica de desarrollo deberá prever que la representación en la Asamblea General de las corporaciones municipales e impositores refleje, con criterios no discriminatorios, la proporción en la que estén presentes en las diferentes autonomías".

Por otro lado, las cajas frenaron en septiembre la concesión de créditos al incrementarlos un 16,%, la menor tasa de crecimiento en lo que va de año, aunque supera el 9,7% contabilizado por los bancos en el mismo periodo. La Confederación de Cajas prevé que la tasa de morosidad de estas entidades, situada en el 0,78%, se mantendrá en mínimos hasta mediados de 2004.