La Acequia Real del Júcar acusa de la contaminación al vertedero de Guadassuar

Los responsables de la Acequia Real del Júcar no albergan la más mínima duda de que el vertido contaminante que ha causado la mortandad de decenas de peces y cangrejos y provocado la protesta de los vecinos de L'Alcúdia por los olores pestilentes durante la pasada semana proceden de la Planta de Tratamiento de Residuos Sólidos de Guadassuar. De ahí que l'Entesa de la Diputación haya propuesto una comisión que investigue el origen de la contaminación. El Ayuntamiento de L'Alcúdia y EU han denunciado los hechos ante el Seprona y la Generalitat.

"Arriba están las aguas limpias y desde donde vierte la planta hacia abajo las aguas se ennegrecen, por tanto no sé de dónde proceden si no es de allí". Así se expresaba ayer el sequier major de la Acequia Real del Júcar, Vicente Llopis, quien advirtió sobre la existencia de numerosos precedentes. Llopis ha recopilado la documentación pertinente para que los directivos del canal de riego puedan presentar la correspondiente denuncia.

Varios agricultores, cuyas parcelas lindan con el último tramo del pequeño barranco con el que conecta una canalización de la planta, y el sequier de L'Alcúdia, José Quintero, conocen directamente el problema. El suelo y las paredes laterales del barranco estaban ayer ennegrecidas y llenas de plásticos y otros restos, a la par que despide malos olores a lo largo del centenar de metros que van desde la planta hasta la Acequia Real del Júcar.

"Hace un montón de años que estoy llamando la atención sobre los vertidos a los empleados de la planta", asegura Quintero, que como responsable de la acequia en el término de L'Alcúdia reside en una vivienda situada junto al mismo canal. "Ellos se ríen cuando les advierto, pero desde que hicieron la planta estamos así, no hay manera de solucionarlo", prosigue el celador, que recuerda las denuncias presentadas.

En las instalaciones existe una balsa donde almacenan los líquidos contaminantes conocidos como lixiviados procedentes de las basuras acumuladas y que transportan en camiones cuba hasta la estación depuradora de Pinedo. Pero "cuando llueve un poco la balsa se les desborda", de ahí que José Quintero lleve más de una década vigilando el desagüe de la planta cada vez que una tormenta aparece por la zona.

Un agricultor recuerda que antiguamente los vertidos se producían "una vez a la semana" y que se producían "a lo largo de la noche". Este pequeño productor de caquis reconoce "estar harto" de denunciar los vertidos malolientes junto a sus vecinos de parcela.

La última gran contaminación de la acequia se produjo, según Quintero, hace dos años en los términos de l'Alcúdia y Guadassuar. "Murieron gran cantidad de peces, entre ellos carpas de hasta cinco kilogramos".

La negativa por parte del diputado de Medio Ambiente, Vicente Aleixandre, de que se haya producido "ningún vertido y escape de la planta" y que la contaminación de la acequia la hayan podido causar aguas fecales arrastradas por las lluvias les produce hilaridad a los responsables de la acequia, "nos quieren hacer ver que un burro vuela, es de risa", dijo el celador de l'Alcúdia. Por su parte, Francesc Signes, alcalde de este municipio y a la vez secretario de Medio Ambiente del PSPV, asegura que la capacidad de la planta de Guadassuar está "desbordada" al recibir el último año "entre 50.000 y 70.000 toneladas de basuras procedentes de la planta de Quart de Poblet, que se halla totalmente colapsada". Unas molestias que han provocado el incremento de las quejas entre los vecinos de la localidad.

Por otro lado, EU-l'Entesa solicitará hoy al pleno de la Diputación de Valencia que constituya una comisión para investigar las posibles responsabilidades de la planta de basuras. También pretende que esta comisión investigue si las instalaciones de Guadassuar "cumplen o no la legislación vigente", así como la cantidad de basura tratada, "la acumulación ingente de compost y los malos olores que sistemáticamente afectan a l'Alcúdia y Guadassuar". El concejal de EU en l'Alcúdia Paco Sanz rechaza la versión dada por el diputado de Medio Ambiente, Vicente Aleixandre, que "intenta echar una cortina de humo sobre el tema para tapar el escándalo ocasionado por la contaminación de la acequia". Según Aleixandre, los informes del Ayuntamiento de Guadassuar y de los responsables de la planta descartan la existencia de vertidos o escapes procedentes del vertedero.