"Por la paz del mundo, le deseo suerte a Bush en las elecciones"

"Es un placer volver a ver aquí al presidente Bush, porque nuestra relación no es sólo ya una relación política, sino una amistad personal fuerte. Deseo al presidente de Estados Unidos toda la suerte en las próximas elecciones por el bien de Estados Unidos y de la paz y la estabilidad del mundo". Con esta breve declaración, el presidente del Gobierno, José María Aznar, clausuró ayer el breve encuentro bilateral que mantuvo con George W. Bush en la sede de la misión estadounidense ante la ONU.

"José María Aznar es un líder muy fuerte, con convicciones basadas en principios de dignidad humana y de libertad", le correspondió el presidente de EE UU, que había invitado a la prensa a dar fe del encuentro, poco más que una ocasión para fotografiarse, si bien el presidente español informó de que habían hablado de Irak y, en concreto, de la nueva resolución que Bush prepara para la ONU, de Oriente Próximo y de asuntos bilaterales.

El secretario de Estado, Colin Powell, la consejera nacional de Seguridad, Condoleezza Rice y el alto cargo de Defensa, Paul Wolfovitz, completaban el marco derecho del retrato de los líderes, que por parte española incluyó a la ministra de Exteriores, Ana Palacio, al embajador de España en Washington, Javier Rupérez, y al secretario de Estado de Comunicación, Alfredo Timermans.

La entrevista, similar a la que Bush celebró ayer con Jacques Chirac y mantendrá hoy con Gerhard Schröder -al que Aznar visitará en Berlín el próximo 2 de octubre, según anunciaron el lunes fuentes gubernamentales-, es la más importante que Aznar ha tenido en Nueva York, pero no la única. El presidente se vio el lunes con el líder brasileño, Inazio Lula da Silva, y acordó con él que viajará a Brasil el próximo 29 de octubre. "Quiero destacar", dijo ayer, "que las reformas que está haciendo son muy importantes". La Moncloa trabaja para que Chile sea otra de las escalas de esa gira de Aznar.

Relaciones con Marruecos

Aznar se entrevistó ayer también con el secretario general de la ONU, Kofi Annan, del que negó que le separen divergencias importantes, con el presidente de Perú, Alejandro Toledo, y con el presidente de Argelia, Abdelaziz Buteflika. No hubo, en cambio, reunión del presidente con el Rey de Marruecos, Mohamed VI, que debutó ayer ante el pleno de la ONU.

Altas fuentes diplomáticas marroquíes han estimado, sin embargo, en Nueva York que las relaciones con España siguen por buen camino y que Aznar viajará en diciembre a Marruecos para asistir a la primera cumbre bilateral que los dos países celebren desde hace mucho tiempo. Si esas buenas intenciones se cumplen, se habrá recuperado totalmente el buen tono de unas relaciones que Aznar espera restablecer también con el alemán Schröder.