La LOCE se estrena en las aulas de educación secundaria con déficits en las instalaciones
Los sindicatos denuncian la "improvisación" y la "nula información" de la Administración
La nueva Ley Orgánica de la Calidad Educativa (LOCE) entró ayer en vigor formalmente en los 331 institutos de la Comunidad Valenciana, que acogen a un total de 299.424 alumnos en los niveles de enseñanza Secundaria, Formación Profesional y Bachilleratos. Pese a la novedad y los cambios introducidos por la reforma educativa del Gobierno de Aznar, la realidad en las aulas valencianas arrastra los mismos problemas de déficit de institutos, de improvisación en la dotación de aulas prefabricadas y de retraso en las obras en marcha que en la pasada legislatura.
"A los problemas de cada año -como son la escolarización del 34% del alumnado de 1º y 2º de ESO en colegios de Primaria; el retraso en el 40% de las construcciones escolares previstas en el Mapa Escolar de 1996 y la improvisación en el montaje de prefabricados y la tardía adjudicación de varios centenares de vacantes por sustitución - se añade la incertidumbre generada por la Consejería de Educación, al anunciar la aplicación de varias medidas para desarrollar la LOCE sin que se haya informado ni negociado con los representantes del profesorado", resumió ayer la federación de enseñanza de UGT. El sindicato considera que el consejero, Esteban González Pons, ha actuado de manera imprudente.
Ante "el déficit de infraestructuras de las zonas metropolitanas", el STEPV advierte de que "el actual ritmo de construcciones es insuficiente" y genera "desequilibrios" en el sistema. Ante el panorama de "incertidumbre", CC OO ha pedido a la Administración que presente "un plan global de desarrollo de la LOCE" y abra un "diálogo inmediato".
Centros como el IES nº4 de Torrevieja, el IES de Moixent, el Lluís Simarro de Xàtiva, el Francesc Gil de Canals, el prometido en La Llosa, o el de Navarrés, que tenía que haberse terminado hace años, arrancaron ayer sin estar acabados. La escolarización en barracones en determinadas poblaciones alicantinas, como Torrevieja, Santa Pola y Calpe, ha pasado de ser "provisional a definitiva". En Jérica-Viver (Alto Planacia) el alumnado sigue en barracones y las obras continúan sin comenzar.
Para Juan Soto, concejal socialista, el caso "más grave" y que resume la situación de Valencia capital se da en el IES Lluís de Santàngel de El Saler, donde "el curso no empezó ayer porque los barracones provisionales no están terminados", pese a que la reforma del centro se anunció en junio (después de siete años de compromisos). Padres y alumnos protestaron ayer ante el lugar donde se instalan los barracones., que no estarán listos hasta octubre. Con más humor se lo tomaron los profesores y alumnos del instituto Serpis, que literalmente tuvieron que "cargar a hombros el mobiliario".
Por otra parte, padres y estudiantes del IES Veles e Vents de Gandia se concentraron en las puertas del centro, de nueva construcción, para protestar porque Educación "no ha cumplido" el plazo previsto para la finalización de las obras, y 350 alumnos se han encontrado en la calle el primer día de clase. El edificio, una obra que se consiguió tras años de reivindicaciones, se ha retrasado, informa Eva Batalla.
Pero el IES Veles e Vents no es el único centro educativo de Gandia que no ha podido comenzar el curso con normalidad. 75 alumnos, de tres años de edad, del colegio de público Roís de Corella llevan dos semanas sin asistir a clase. Otros 150 alumnos del Sant Marc de Beniarjó tampoco asisten a clase, dos semanas después del inicio oficial del curso. Los padres se niegan a llevar a sus hijos a causa de unas obras que debían haber concluido.
El consejero Esteban González Pons anunció en la inauguración del curso en el instituto de Xàbia (La Marina Alta), que su departamento retomará "las licencias retribuidas para que los docentes valencianos puedan seguir formándose en sus materias". González Pons salió al paso de los problemas en instalaciones asegurando: "No tenemos más incidencias que las habituales de una comunidad educativa tan grande como la nuestra. En cualquier caso, se procurará que los inconvenientes sean mínimos y que se resuelvan con la máxima celeridad".
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