La FERE dice que escolariza al 35% de los inmigrantes de la capital

La Federación de Religiosos de Enseñanza de Madrid (FERE), que agrupa al 70% de los colegios concertados de la región (privados, pero sostenidos con fondos públicos), asegura que el 35% de los 46.610 niños inmigrantes de cero a 16 años escolarizados en la capital está matriculado en sus centros.

Con esta afirmación quiere salir al paso de las críticas que recibe de diferentes sectores educativos sobre su escasa implicación en la escolarización de los niños inmigrantes. Emilio Díaz, secretario técnico de FERE, reconoce que de los 80.000 alumnos inmigrantes de la región sólo un 25% estudia en sus aulas. Pero matiza que los centros religiosos no tienen la misma implantación en toda la Comunidad.

"Es cierto que en los municipios del oeste, norte y este de la región el 90% de los inmigrantes acude a escuelas públicas, pero es que en esas zonas tenemos muy pocos centros. Sin embargo, en la capital, donde la escuela concertada religiosa concentra a más de la mitad del alumnado total, atendemos al 35% de los niños de otros países", explica.

Díaz asegura que en los colegios que tiene FERE en la capital estudian ahora 16.000 alumnos extranjeros, cinco veces más que los 3.500 que había en 1999, y añade que no es cierto que ellos matriculen sólo "a los hijos de embajadores". "Muchos de los inmigrantes que tenemos en nuestras aulas necesitan apoyos por su desfase escolar o su desconocimiento del idioma", matiza.

El secretario técnico de la FERE explica que los colegios religiosos concertados se sienten "escuela de interés público" y reclama a la Consejería de Educación que "dignifique" las cuantías económicas que reciben por aula convenida. "Los 3.000 euros anuales por clase concertada que percibimos ahora son deficitarios. Eso lleva a que nuestros centros acaben el curso con pérdidas del 50% al 130%", añade.

Díaz resalta, además, que los centros religiosos sostenidos con fondos públicos tienen una gran demanda. Y para demostrarlo explica que en junio sólo pudieron dar plaza a la mitad de los 15.000 o 20.000 niños de tres años que la solicitaron.