Locales de ocio
Con estupefacción oigo decir al representante de la Asociación de Locales de Ocio de Madrid que las medidas que pretende imponer el Ayuntamiento para controlar el ruido que impide a los vecinos dormir son una locura porque los dueños de los locales tienen familias que alimentar. Está claro, los vecinos no tenemos familia; los vecinos no tenemos derechos a pesar de que el derecho al descanso está recogido en los Derechos Fundamentales; los vecinos de las zonas donde los dueños de los locales de ocio se forran sólo tienen derecho a ajo y agua.
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