_
_
_
_
ESTRENOS | 'El bonaerense'

Pablo Trapero hace un salvaje retrato de la policía argentina

El director mezcla en 'El bonaerense' realidad y ficción y actores con familiares

Elisa Silió
Más información
Cine arrancado de la vida

El boneaerense se acerca al mundo de la policía, pero no pretende, dice Trapero, "contar los enredos policiales como si se tratase de una película policial, ése no es el objetivo". Su propósito es "acompañar a Zapa mientras su vida se templa en un ambiente hostil que provoca más hostilidades", afirmó el cineasta. Zapa es un cerrajero de un pequeño pueblo del Gran Buenos Aires que pasa una noche entre rejas tras abrir una caja fuerte y, recomendado por su tío, se convierte en aspirante a la policía bonaerense, la más controvertida de Argentina.

"El mundo de la policía fue un descubrimiento, conocí gente y locales que nunca hubiera visitado de no ser por la película, e hice una doble investigación: por un lado, la más elemental de acudir a una comisaría o charlar en la calle con un agente, y por otro, el trabajo de documentación con periodistas o policías retirados", dijo el productor, que estudió en la Universidad de Cine de Buenos Aires. "Cuando se estrenó la película fue curioso. Los oficiales de policía argentinos negaban los hechos y al mismo tiempo salían en los diarios y en los noticieros cosas terribles que ellos hacen", contó.

Mundo grúa se ródo en vacaciones y en los fines de semana con un presupuesto de 50.000 dólares y con la ayuda de amigos. "Fue una película muy barata. La pagué también con el dinero que ganaba con los premios de un corto. Pero en El boneaerense la estructura de producción no podía ser la misma. Empezamos a rodar a finales de 2001 y llegó el gran corralito y no podíamos sacar la plata del banco. Así que tuvimos que parar el rodaje varias veces. Entre medias tuvimos cinco presidentes", ironizó.

Trapero deja claro que no es una película biográfica, "pero me gusta que salgan cosas que tienen que ver conmigo, como ropa de cuando tenía 15 años" explica. "Mi abuela es la madre de Zapa, mi viejo es quien reclama las llaves, mi vieja es quien enseña el apartamento y hasta yo salgo. La mayoría son actores, pero también salen policías retirados y alguno en activo que luego ha tenido problemas", relató. "El entrenador de la academia es un policía verdadero que invierte su vida en intentar mejorar la situación en las comisarías. Me gusta que el espectador se pregunte si son actores o policías".

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Elisa Silió
Es redactora especializada en educación desde 2013, y en los últimos tiempos se ha centrado en temas universitarios. Antes dedicó su tiempo a la información cultural en Babelia, con foco especial en la literatura infantil.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_