El presupuesto de 2004 aumentará un 6% la inversión pública

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, adelantó ayer que los presupuestos de 2004 recogerán un aumento del esfuerzo inversor del Estado de en torno al 6% y apostarán de nuevo por el déficit cero y el equilibrio. En una encendida defensa de la política económica del Ejecutivo, Montoro calificó de "frivolidad" vincular déficit cero y accidentes y afirmó que el horizonte de bajada de impuestos "no se ha agotado".

Montoro, que intervino en un acto organizado por la Asociación Española de Directivos, trató de salir al paso de las críticas que ha recibido el Gobierno desde los sindicatos y los partidos de la oposición a raíz de los accidentes registrados en el sector aéreo y ferroviario en los últimos meses.

Y como la mejor defensa es un buen ataque, Montoro intentó demostrar, con cifras, que la política de déficit cero no ha influido para nada en las inversiones públicas. Ni influirá en el futuro. Así, el ministro explicó que los nuevos Presupuestos del Estado para 2004 mantendrán el esfuerzo inversor, con un aumento de en torno al 6% respecto a 2003. Este año, ese esfuerzo inversor del Estado (que incluye las inversiones reales y las transferencias de capital) se incrementó un 6,8% respecto a 2002 y se situó en 15.584,5 millones de euros.

El titular de Hacienda, muy satisfecho de los resultados obtenidos con las sucesivas rebajas de impuestos ("medio millón más de contribuyentes en 2002", "más recaudación"...), precisó que desde las distintas administraciones públicas se invirtió en 2002 el 3,4% del PIB, cuando la media en la UE es del 2,3%, y todo ello, bajando la carga que supone la deuda pública sobre el conjunto de la economía.

En dinero contante y sonante, añadió, las previsiones de 2003 suponen que el esfuerzo inversor del sector público estatal en su conjunto (entes públicos, ministerios...) ascenderá a 24.800 millones de euros "frente a los 10.800 millones de euros de 1995".

Ese círculo virtuoso que defiende a capa y espada Montoro, expresado en la fórmula "menos impuestos, más recaudación, más inversión", seguirá en el futuro, según su opinión. "El horizonte de bajada de impuestos no está agotado", aseguró Montoro, quien se mostró convencido de que "no se puede ser Gobierno de España sin comprometer una bajada de impuestos".

Gracias a las rebajas impositivas, sostiene Montoro, España crece a ritmos por encima del 2% "por nuestras propias fuerzas y no, como se dijo en su momento, por impulso de los demás". Ahora, explicó, los grandes países, si acaso, contribuyen a limar el crecimiento. "Si no fuera por la demanda exterior, que ha restado en torno a un punto del PIB al crecimiento, España estaría creciendo al 3%", concluyó.

Cupo vasco

Preguntado por las relaciones con el Gobierno vasco y las discrepancias entre éste y la Administración central en torno al pago del cupo, el titular de Hacienda señaló que "el Gobierno vasco tiene que cumplir la ley".

Según Hacienda, el Gobierno vasco ha dejado de ingresar 32,2 millones de euros que tenía que haber abonado el pasado 31 de mayo bajo el argumento de que, así, se descuenta la cantidad correspondiente al abono que se hizo en 2001 a las comunidades del régimen común por el traspaso de las competencias de Sanidad.

"No admitiremos nunca interpretaciones unilaterales sobre la cuantía del cupo", añadió, para a renglón seguido advertir al Ejecutivo que preside Ibarretxe de que el Gobierno central dispone de "mecanismos de carácter administrativo e incluso procedimientos judiciales, llegado el caso", para hacer cumplir la ley.

El responsable de Hacienda acusó también a "los líderes del PSOE" de proclamar a los cuatro vientos sus ansias intervencionistas por cuestionar la labor de los presidentes de las empresas públicas privatizadas por el PP y anunciar la conveniencia de su relevo si el partido socialista logra la victoria en las urnas el próximo año.