_
_
_
_
Reportaje:PRECAMPAÑA ELECTORAL

Islotes entre el asfalto

La conciencia ambiental avanza más rápido que las políticas sostenibles de los municipios

Tereixa Constenla

El 77,3% de los andaluces vería con buenos ojos que se limitase el uso de automóviles en sus ciudades en favor de espacios ganados para el transporte público, las bicicletas o los peatones. Tres de cada cuatro personas entrevistadas en 2002 por el IESA para el Ecobarómetro, una encuesta anual de la Consejería de Medio Ambiente, apoya una medida que, de entrada, rebajaría los niveles de contaminación atmosférica y los ruidos, sin contar la incidencia sobre los niveles individuales de agresividad, que de momento no figuran como indicador medioambiental en los informes.

Son dos -calidad del aire y ruidos- de los principales problemas ambientales que caracterizan a las localidades andaluzas, según el secretario general de Políticas Ambientales de la Junta de Andalucía, Antonio Llaguno, que completa la lista con el tratamiento de los residuos y la movilidad urbana, íntimamente ligada al tráfico. El análisis de estos indicadores servirá de base para diagnosticar la situación de cada una de las 111 localidades que se han adherido al programa Ciudad 21, diseñado por la Consejería de Medio Ambiente para los municipios de más de 10.000 habitantes.

El reciclaje de papel y cartón durante 2001 evitó la tala de un millón de árboles"
Todavía encuentras talibanes que creen que el medio ambiente es un freno"
Más información
IU cree que la impugnación de sus listas por Los Verdes es "burda propaganda"

De ese examen dependerán luego las propuestas que cada localidad, según su propio mapa de problemas, tenga que acometer para avanzar hacia la sostenibilidad, que no es otra cosa que la combinación entre el desarrollo económico y el respeto medioambiental para evitar la esquilmación de recursos.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

El juicio sobre la situación actual varía según lo que se evalúe y desde cuándo. A la vista del Ecobarómetro, la sensibilidad ambiental de la población es alta. Algunos datos lo corroboran. Crece la colaboración ciudadana en la gestión de residuos. El reciclaje de papel y cartón depositado en contenedores en Andalucía en 2001 evitó la tala de un millón de árboles, expone Llaguno. El vidrio reutilizado llegó a 39.000 toneladas ese año.

El panorama puede resultar desalentador, por el contrario, si se repara en otras cifras como el consumo de agua en ciertos municipios turísticos del litoral, la escasez de zonas verdes -pocos municipios cumplen el estándar legal de ofrecer cinco metros cuadrados de espacios verdes por habitante- o la evolución del parque de vehículos. Casi uno de cada dos andaluces que reside en ciudades con más de 30.000 habitantes tiene coche, según el último informe de Medio Ambiente correspondiente a 2001.

La situación es además muy desigual. "Cada pueblo es un mundo", indica Antonio Maestre, que preside la comisión de medio ambiente de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP). Hay localidades que apuestan por un desarrollo armónico desde hace años como el caso de Almonte (Huelva), favorecido por su ligazón al Parque Nacional de Doñana, y otros que aprueban nuevos campos de golf sin preocuparse por el consumo hídrico. "La economía en el agua es fundamental", añade Llaguno.

Todavía en 1999, según un informe elaborado por la Cámara de Cuentas, se recogía que las pérdidas de agua en la red de distribución eran del 29% en el conjunto andaluz. La depuración de agua aún no cubre a la totalidad de la población: en 2001 abarcaba al 61,43%. Málaga es la provincia con más población cubierta mientras que Cádiz sólo lo está poco más de la mitad. El consumo de agua, además, está generando problemas de sobreexplotación en el 21,6% de los acuíferos andaluces. De alguna manera, el programa Ciudad 21 es un intento de la Administración autonómica por "homologar" los requisitos ambientales en los 131 municipios que acogen al 76% de la población.

En estos procesos resulta vital la participación ciudadana y la educación ambiental, que contribuye a erradicar prácticas poco respetuosas con el medio ambiente y ayuda a reducir el consumo de recursos agotables como el agua y los combustibles fósiles (petróleo, gas natural o carbón).

Queda mucho por hacer, pero el avance ha sido bastante grande", señala Maestre, que también preside la Red de Ciudades Sostenibles de Andalucía de la FAMP, a la que pertenecen 204 municipios, diputaciones y mancomunidades de un total de 800. Maestre cree que la conciencia social ha mejorado y defiende la búsqueda de "complicidades sostenibles" para lograr que los responsables municipales abracen nuevos modelos de desarrollo económico. "Todavía te encuentras con muchos talibanes que creen que el medio ambiente es un freno", lamenta.

Los retos más inmediatos, en su opinión, residen en la gestión de residuos de inertes (procedentes de la construcción) o electrónicos. "A medida que las sociedades avanzan se crean problemas nuevos", apunta.

DOS EXPERIENCIAS DISTINGUIDAS EN SEVILLA

5.500 vecinos disponen de recogida neumática

El Ayuntamiento de Sevilla recibió el premio a la ciudad más sostenible en el ámbito de la gestión de residuos en el último Salón Internacional de la Energía y del Medio Ambiente, celebrado en Barcelona. El reconocimiento fue justificado por diversas iniciativas como la implantación del sistema de recogida neumática de residuos en barrios del casco histórico y Pino Montano, la incorporación de vehículos eléctricos para la recogida de basuras, la creación de la red de puntos limpios y el aprovechamiento integral de residuos. El sistema móvil de recogida neumática en el casco antiguo, que requiere una inversión de 3,6 millones de euros aportados por Bruselas (el 72,3%) y el Ayuntamiento (27,7% restante), incluye 15 buzones, dos puntos de recogida, una central de recogida neumática móvil y casi un kilómetro de red de tuberías. Varias calles del barrio de Santa Cruz estrenaron en 2000 los buzones de recogida. La red, que afecta a 5.500 vecinos, se completó con la instalación de otros puntos en las calles comerciales del casco antiguo. Con este sistema se rebaja el impacto estético y la ocupación de contenedores en zonas de especial interés histórico y turístico.

Farolas y colegios con energía solar fotovoltaica

El impulso dado a las energías renovables y a las políticas de eficiencia energética también mereció el aplauso en el Ecomed de Barcelona. Englobadas en el proyecto Sevilla Ciudad Solar las iniciativas puestas en marcha desde la Agencia Local de la Energía -su simple creación es una señal destacable- comienzan a servir de modelo en otras ciudades españolas. Como actuaciones más aparatosas figuran las primeras farolas de energía solar fotovoltaica, que iluminan el Camino de la Reina, el último enclave agrícola de Sevilla donde residen 150 familias, y la instalación de 22 nuevas instalaciones solares fotovoltaicas para producir electricidad en otros tantos colegios públicos de los seis distritos de la capital andaluza. Cuando el proyecto de los colegios esté amortizado el ayuntamiento tendrá unos ingresos de 350.000 euros al año por la energía solar fotovoltaica conectada a la red eléctrica. Sevilla se ha convertido de este modo en la ciudad española con más instalaciones de energía solar fotovoltaica de conexión a la red de titularidad municipal. Con el desarrollo del II Plan Energético el Ayuntamiento logrará un ahorro de 3 millones de euros al año.

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Sobre la firma

Tereixa Constenla
Corresponsal de EL PAÍS en Portugal desde julio de 2021. En los últimos años ha sido jefa de sección en Cultura, redactora en Babelia y reportera de temas sociales en Andalucía en EL PAÍS y en el diario IDEAL. Es autora de 'Cuaderno de urgencias', un libro de amor y duelo, y 'Abril es un país', sobre la Revolución de los Claveles.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_