Damasco está convencido de que será el próximo objetivo
El apoyo del Reino Unido y los consejos de la diplomacia francesa ante las acusaciones de Estados Unidos no han conseguido tranquilizar a la población ni al Gobierno sirio, que están convencidos de que serán el próximo blanco del Ejército norteamericano.
Ésta es la conclusión a la que han llegado tras escuchar ayer las amenazas de Estados Unidos, pero sobre todo los ataques de Israel, cuya prensa aseguraba ayer que "Siria se ha convertido en el centro logístico del terror regional" y que el régimen de Damasco es el "más serio contendiente para suceder a Sadam Husein".
En medio de esta polémica con el Gobierno de Estados Unidos, Siria ha empezado ya a sentir en su economía los efectos perjudiciales de la caída del régimen de Sadam Husein. El país ha dejado de recibir los 200.000 barriles de petróleo que diariamente llegaban procedentes de pozos iraquíes y por los que pagaba a Irak un precio irrisorio.
La empresa siria encargada de distribuir el crudo en el mercado internacional ha anunciado ya a sus clientes el corte de este suministro, que repercutirá negativamente en la delicada situación de Siria.
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