Vía libre al Madrid

La Real ha perdido gas en un momento crítico del campeonato. Permitió el impensable empate del Villarreal en Anoeta y salió derrotado de Riazor. El Deportivo jugó con intensidad y clase. Está claro que todavía persigue el título, que en estos momentos parece cada vez más cerca del Real Madrid. Ha puesto seis puntos de distancia sobre sus dos principales perseguidores y está en disposición de afrontar con cierta serenidad sus obligaciones en España y en Europa.

A la Real se le han escapado los dos últimos partidos en las mejores condiciones posibles. Frente al Depor cobró una rápida ventaja con un excelente gol de Nihat y con el gran despliegue del equipo. Era un equipo firme, que jugaba de memoria, sin complejos. Pero el tanto produjo un efecto inesperado. Lejos de acentuar sus mejores rasgos, la ventaja generó una actitud administrativa en sus filas. Abandonó el ataque, se refugió en su campo y concedió la dirección al Deportivo, que jugó a lo grande en muchas fases del encuentro. El ingreso de Valerón fue determinante en el segundo tiempo. El ingenioso jugador canario se convirtió en un problema insuperable para la Real, que terminó desinflada.

Fue una jornada con resultados que no aclaran el panorama a nadie, a excepción del Madrid. Hay congestión en la zona media de la clasificación, donde la mayoría de los equipos juegan con la mirada en el retrovisor, incluido el Barça, que vuelve a ofrecer síntomas alarmantes. Nadie se puede permitir errores porque hay sopapos para salir de los puestos del descenso. El Recreativo, que parecía condenado, vive en estado de euforia. Ganó en Zorrilla al Valladolid y ha abandonado la última posición. En San Mamés, el Athletic superó un duro trago frente al Atlético de Madrid, desastroso en los remates.