"Mis retos son el trasvase y los fondos europeos"
Elvira Rodríguez (Madrid, 1949) reconoce que su aterrizaje en el Ministerio de Medio Ambiente se ha producido en una situación delicada, con una guerra de fondo y la herencia del Prestige. Directa, cauta y decidida, tiene la mirada franca y una sonrisa maternal. Ocupa el despacho llamado de verano porque prefiere la luz natural de los balcones al formalismo del despacho oficial, forrado de madera.
Pregunta. Mal momento para entrar en el Gobierno.
Respuesta. Políticamente complicado. El Prestige es una catástrofe que pasó hace cuatro meses y que ha dado lugar a que el ministerio trabaje duro para paliar los efectos. Mi primera salida oficial fue a Galicia porque quería verlo in situ y hablar con la gente.
"Concedo entrevistas a quien me las pide. Esta semana recibiré al consejero de Aragón"
"En este ministerio todo se decide por métodos asamblearios. Está lleno de consejos"
P. Se ha hablado mucho de las ayudas europeas. ¿Con cuáles cuentan realmente?
R. Estamos aplicando fondos estructurales a la limpieza y regeneración de playas. Si el fondo de solidaridad no es adecuado, estudiaremos otros instrumentos de flexibilidad similares a los que se firmaron cuando no se llegó a un acuerdo de pesca con Marruecos. Tienen un tope de 200 millones de euros y depende del coste que tendríamos que cofinanciar. En estos momentos no estamos en condiciones de saberlo. Pelearíamos primero por el concepto.
P. Conocía desde su anterior cargo (secretaria de Estado de Presupuestos) el Ministerio de Medio Ambiente. Una vez dentro ¿qué es lo que más le ha sorprendido?
R. Después de siete años de hacer presupuestos, de discutir para qué se quiere el dinero y cuáles son los objetivos, lo conocía bastante. Pero desconocía la cantidad de cosas diferentes que hacen en la parte de calidad ambiental, protección de la naturaleza, parques nacionales, lo que significan los impactos ambientales, los convenios de depuración y eliminación de residuos. Estoy muy contenta de cómo trabajan en ese área del ministerio, que no la he montado yo. Me la he encontrado. Se pueden hacer cosas en las que no había pensado nunca, como los paseos interiores por las márgenes de los ríos. Es un ministerio precioso.
P. Muchas materias y pocas competencias.
R. Eso ya lo conocía, pero 25 años después de crear el Estado de las autonomías, la cohesión territorial y la coordinación de un país tan pequeño y variado es algo muy importante. Hay determinadas cosas que no sólo deben ser comunes, sino que tienen que serlo. Y esa labor de normativa básica y de coordinación que le da la Constitución a la Administración central es esencial. Acabamos de tener dos buenos ejemplos, la Ley de Montes y la del Ruido que se acaban de aprobar.
P. Ambas se llevaban negociando desde la época socialista.
R. Sí, sí pero han salido ahora. Yo me las encontré y he conseguido que salieran.
P. Tiene que negociarlo todo con las comunidades autónomas.
R. Precisamente por las competencias compartidas, la conformación de voluntades en este ministerio es complicada. Viniendo de Hacienda, donde la regulación fiscal se discute pero se lleva a cabo de una manera lineal, decía con humor que en este ministerio se decide todo por procedimiento asambleario. Está lleno de consejos.
P. En el primero que presidió, la conferencia sectorial, usted fue muy rigurosa con el reloj.
R. Creo que di la palabra a todo el mundo. Escuché. Pregunté si había ruegos y preguntas. Alguno opinó y terminamos. Las reuniones tienen que durar lo justo.
P. Su ministerio ha generado fundaciones que manejan mucho dinero. ¿Qué sentido tiene que la de Parques Nacionales financie la restauración de molinos artesanos en Mallorca?
R. Lo analizaré con el resto de cosas del ministerio. Aunque queda poco tiempo de legislatura, quiero repasar todas las áreas del ministerio. Me gusta aplicar los criterios de eficacia y eficiencia. Ésta es la norma. Gestionamos caudales públicos de todos los contribuyentes. Hay fundaciones, como la Thyssen-Bornemisza, de la que he sido patrona, que son muy eficaces.
P. Por iniciativa suya se crearon las sociedades estatales de agua que manejan enormes recursos sin control. En dos auditorías al ex presidente de Aguas del Sur se detectó que había colocado fondos de la sociedad en una cuenta particular. ¿Se llevará el caso a la fiscalía?
R. No conozco el asunto, pero sí los mecanismos de control. Estas sociedades dependen de Medio Ambiente, pero pertenecen al Patrimonio, que controla su tesorería y sigue sus cuentas. Están sujetas a la Intervención del Estado. Si tras las dos auditorías en Aguas del Sur se vio lo de la cuenta es que los controles funcionan. Desde Hacienda ya comprobamos que las sociedades acumulaban excesiva tesorería porque habían recibido muchas aportaciones de capital y el periodo de maduración de las obras hidráulicas es largo.
P. Dónde siente que manda más, ¿ahora o cuando manejaba los presupuestos?
R. Tengo genio y empuje. Me avisaron que iba a tener menos mando del que tenía en Hacienda. Ahora me llaman ministra, pero cuando tenía una dotación presupuestaria o un informe sobre la relación de puestos de trabajo con su asignación de productividad, la verdad, la sensación de poder era bastante.
P. Acaba de viajar a Bruselas para reunirse con la comisaria Margot Wallstrom. ¿De qué hablaron?
R. Fue una reunión de una hora de trabajo para conocernos. Me gusta plantear las cosas claras y concisas. Dimos un repaso a los asuntos que le preocupaban sobre España. Hablamos del cambio climático, de la aplicación de los fondos estructurales, del Prestige y del Plan Hidrológico. Nos entendimos.
P. ¿A qué conclusiones llegaron sobre la ejecución del plan?
R. Le dije que se nos había politizado. Está en fase de información, por eso nos piden datos. Me dijo que teníamos que seguir avanzando y le pedí que el avance fuera rápido. Hay quejas de distintos colectivos. Wallstrom me adelantó que no sólo quiere leer, sino oír a los representantes de las distintas posturas y que eso se iba a hacer en un centro independiente en Ispra, Italia, coordinado por la Comisión en plazo muy breve. Salí contenta de la reunión y la invité a Doñana. Seguiremos trabajando.
P. La clave es si habrá financiación europea para el trasvase.
R. Los españoles tenemos derecho a un dinero europeo que genera riqueza y cofinancia infraestructuras. No podemos perder esos fondos comunitarios, no ya por el ministerio, sino por España.
P. Le queda sólo un año por delante. ¿Qué retos se ha marcado para tan poco tiempo?
R. Me gustaría que las cuestiones ligadas al trasvase del Ebro y al Plan Hidrológico quedaran enfocadas, con alguna adjudicación con todas las garantías de la ley y las correcciones de impacto ambiental. Voy a instalar en el despacho un cronograma para las obras del trasvase, las del plan y la aplicación de los fondos comunitarios.
P. ¿Y el cambio climático? España es de los pocos países que carecen de una estrategia.
R. Si no entra en el cronograma, entrará en la libreta. Tenemos que ponernos en contacto con Economía y avanzar. En este tipo de actuaciones el ministerio puede coordinar pero debemos trabajar juntos todo el Gobierno.
P. ¿Y qué le parece que se gasten millones de euros en conservar el lince y no se pongan de acuerdo con la Junta de Andalucía para su cría en cautividad?
R. No creo que a la Junta le resulte muy agradable que desde que he tomado posesión hayan muerto tres linces. Si tenemos un convenio negociado para reproducción en el que ellos ponen los animales y nosotros el programa tenemos que ser responsables y no hacer banderías políticas. En breve tomaré posesión como presidenta del patronato de Doñana, donde espero que nos pongamos de acuerdo. Si el lince desaparece, tendríamos que explicarlo.
P. ¿Tiene previsto entrevistarse con el presidente de Aragón para hablar del Plan Hidrológico?
R. Concedo entrevistas a quien me las pide. La semana que viene vendrá a verme el consejero de Medio Ambiente. En la prensa de Aragón se ha quejado de que no le recibía. ¿Cómo podía hacerlo si han pasado 10 días en Kioto?
P. Ha mencionado sus retos a largo plazo. ¿Cuáles son los inmediatos?
R. Culminar con el Prestige en la parte que nos toca; limpiar las playas para el 1 de junio e insistir en la campañas educativas. No somos gestores ambientales, pero todo lo que hagamos para que en los niños sea tan automático reciclar como lavarse los dientes es lo mejor que podemos hacer por preservar el medio ambiente del futuro.
P. No será por dinero. Su antecesor comprometió muchos millones de euros en publicidad.
R. Por eso, por eso. Para gastarlos bien.
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