El 90% de los muertos en accidente de coche no llevaba puesto el cinturón

Nueve de cada 10 muertos en accidente de tráfico en Barcelona viajaban sin llevar el cinturón de seguridad abrochado. En el caso de los pasajeros, todos los muertos iban sin él. Un estudio municipal y otro del RACC muestran que buena parte de la población sigue siendo reticente a utilizar esta medida de seguridad, que es obligatoria. La Guardia Urbana impuso el pasado año 20.198 multas por ello, muchas más que las 12.199 que se registraron en el año 2001.

Un total de 358.000 conductores catalanes (el 11,4%) no utiliza nunca el cinturón de seguridad. Dos de cada tres son hombres. Y el porcentaje se hunde cuando se analiza la conducta de los pasajeros: sólo el 35% de los que se sientan atrás se ponen el cinturón. El resultado es que los accidentes tienen consecuencias más graves para conductores y acompañantes. El número de muertes que se evitarían en España anualmente si todos los usuarios del coche utilizaran el cinturón asciende a un millar, afirmó ayer el presidente del RACC, Sebastià Salvadó.

El Ayuntamiento de Barcelona ha decidido incrementar las medidas contra esta práctica. Además de actuaciones formativas y propagandísticas, la Guardia Urbana inició ayer una campaña preventiva que se prolongará hasta el 10 de abril y se repetirá al iniciarse el verano, según anunciaron los concejales responsables del tráfico, Carme San Miguel y Francesc Narváez. Los agentes vigilarán que los conductores y pasajeros lleven el cinturón, que es obligatorio en todos los casos en los asientos delanteros y en los traseros cuando el vehículo sale de fábrica con cinturones. Los antiguos que no lo llevan representan el 15% de los vehículos que circulan por Cataluña.

El análisis de los accidentes en función del vehículo muestra que el 52% de los lesionados viajaba en coche y el 31% en moto. El 14% de los heridos o muertos eran peatones y el 24%, pasajeros. Los conductores representan el 62%. El estudio del RACC busca a conocer el comportamiento de conductores y pasajeros respecto al cinturón. En total, el 88,6% dice que utiliza esta medida de seguridad, pero entre los conductores el porcentaje baja hasta el 85%, mientras que sube al 90% entre quienes viajan como acompañantes en el asiento delantero, pero desciende hasta el 35% entre quienes van en los asientos traseros.

Los hombres utilizan el cinturón menos que las mujeres en todos los casos. Por edades, los menos previsores son las personas comprendidas entre 18 y 24 años, que dejan de utilizar el cinturón en el 16,1% de los casos. Los mayores de 35 años lo usan en más del 89%.

Entre los motivos que declaran los conductores para abrocharse el cinturón destaca la seguridad (90%). El 46,3% dice que lo hace para evitar la multa.