Los senadores populares rechazan unidos una proposición contra la guerra

"Si estuvierais tan seguros de que este Gobierno no tiene legitimidad, ya habríais presentado una moción de censura", espetó ayer Esteban González Pons, portavoz del Grupo Popular en el Senado, a la oposición. Se celebró en la Cámara alta el primer debate con votación sobre la guerra de Irak y no se registraron sorpresas. Todos los senadores del PP presentes (141) se opusieron a la moción respaldada por 83 parlamentarios de la oposición que había presentado la Entesa Catalana de Progrés. El debate degeneró en una gran bronca nada más tomar la palabra González Pons. Los abucheos fueron subiendo de todo hasta resultar perfectamente audibles gritos como "fascistas", "Franco, Franco", "guerra no", "basta ya", "fuera", o "Guantánamo".

El portavoz de Entesa, Jordi Solé Tura, preguntó a los senadores del PP: "¿Por qué están ustedes a favor de esta guerra?". El senador de Izquierda Unida Manuel Cámara aseguró que en las Azores "Aznar sonreía" y preguntó: "¿Ustedes se sienten felices?". Desde CiU, el senador Francesc Marimon recordó que "el 60% de la población de Irak son niños y jóvenes" y que no hay guerras limpias. "En la primera guerra del Golfo nos enteramos después que había habido 130.000 muertos y parecía una guerra limpia". El portavoz socialista, Juan José Laborda, concluyó: "El Gobierno está encantado de haber estado en una isla decidiendo el futuro de todos".

Abucheos y aplausos

Todas estas intervenciones se produjeron sin que mediaran ni abucheos ni aplausos por parte de los senadores. Pero cuando el portavoz del PP, Esteban González Pons, subió a la tribuna y arrancó con la lectura de un texto que dijo circula por Internet comenzaron los abucheos, trufados por aplausos del PP. Ese primer texto resume la comparación del régimen de Sadam Husein con el de Hitler. Después, González Pons optó por pedir directamente a la oposición, tuteándoles, que dejen al PP "pensar libremente" y no se crean "poseídos de una verdad tan absoluta" que les dé "derecho a insultar y perseguir al discrepante". A partir de ese momento los abucheos fueron subiendo de tono.

Cuando el portavoz popular pidió a sus adversarios una condena "alta y clara" a quienes "están boicoteando" los actos públicos del PP y les esté llamando "asesinos y terroristas", los gritos desde la bancada de la oposición ya fueron "Franco, Franco".

Pons mantuvo que "el pueblo español está contra la guerra, pero no contra el Gobierno", lo que recibió la sonora réplica de la oposición: "¡No!".