Turquía niega ante la OTAN haber entrado en el norte de Irak

La OTAN no tiene previsto retirar la ayuda de defensa preventiva a Turquía, pero no oculta su inquietud por el eventual movimiento de tropas en el norte de Irak. El embajador turco ante la Organización Atlántica garantizó ayer a sus colegas que su país no tiene intención de invadir el Kurdistán iraquí. Alemania y Bélgica habían amenazado con retirar el apoyo militar a este socio ante las informaciones en ese sentido.

El Consejo Atlántico, reunido en sesión informal, y el Comité de Planes de Defensa (CPD), del que forman los 19 miembros excepto Francia, recibieron ayer por la mañana "mensajes de tranquilidad" del representante turco, Ahmet Üzümcü, que negó la entrada de soldados este fin de semana. El ministro de Exteriores, Abdulá Gül, también transmitió la misma información al secretario general de la OTAN, George Robertson.

Portavoces aliados afirmaron que el embajador aseguró que "ningún soldado se encuentra actualmente en territorio iraquí" y que "tras sus palabras los representantes se habían quedado más tranquilos". La inquietud no sólo fue transmitida por alemanes y belgas, sino también expresada de palabra por los representantes de EEUU, Reino Unido y España, entre otros, según testigos presenciales.

Turquía ha reforzado su presencia militar en la frontera con el Kurdistán para evitar el flujo masivo de refugiados y acciones terroristas aisladas y poder canalizar con mayor orden la ayuda humanitaria, según explicó el embajador turco.

Pero el primer ministro, Recep Tayyip Erdogan, envió señales confusas el domingo en un discurso a la nación al afirmar que Turquía y EE UU están de acuerdo en lo relativo a Irak, así como en la voluntad turca de desplazar tropas al norte del país. El presidente norteamericano, George W. Bush, ha pedido a Erdogan frenar acciones de ese tipo.