El TSJ ratifica el freno cautelar a las obras de la línea eléctrica en Simat
Iberdrola había recurrido contra la decisión del Consistorio que le negaba la licencia
La sección segunda de la sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJ-CV) ha dado la razón al Ayuntamiento de Simat de La Valldigna (La Safor) y desestima el recurso de apelación presentado por Iberdrola contra la decisión del Consistorio de no conceder a la compañía eléctrica licencia de obras para la ejecución de la línea de alta tensión.
El TSJ se suma así al auto del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 2 de Valencia que, el pasado 25 de junio, suspendió "cautelarmente" dichos trabajos hasta que se resolviese el recurso de alzada que el Consistorio de Simat presentó contra el proyecto. En concreto, contra el tramo de la línea de alta tensión que discurre entre Vilanova de Catelló, atraviesa La Ribera y el norte de La Vall d'Albaida por la sierra del Buscarró, en Quatretonda, y tiene su último apoyo en Simat.
El Ayuntamiento de Simat, que preside el socialista Vicent Palomares, presentó un recurso de alzada ante la Generalitat contra "la autorización administrativa y declaración de utilidad pública" de este primer tramo de la línea de alta tensión Vilanova de Castelló-Gandia. Además, negó la licencia de obras a Iberdrola para que iniciara la ejecución de la línea. La compañía apeló al Juzgado de lo Contencioso-Administrativo para recurrir la decisión del Consistorio de Simat. Pero el tribunal dio la razón al municipio. El TSJ de la Comunidad Valenciana no sólo ha revalidado el auto judicial, sino que impone a Iberdrola las costas del recurso de apelación.
Simat no es el único municipio afectado por la nueva línea de alta tensión entre Vilanova de Castelló y Gandia que ha recibido el respaldo de la justicia. En La Ribera, las localidades de Manuel y Barxeta también rehusaron conceder a la compañía eléctrica licencia de obras para la ejecución del trazado. El juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 2 de Valencia consideró en ambos casos que la autorización de la Generalitat al proyecto no concedía a Iberdrola la "potestad" para ejecutar las obras.
La línea eléctrica se enmarca en el grupo de actividades "molestas, insalubres, nocivas o peligrosas". Por ello consideraba que los trabajos debían adecuarse al planeamiento urbanístico de los municipios afectados por el trazado. Señalaba asimismo que Iberdrola debía presentar un plan especial intermunicipal, que resolviera las incompatibilidades entre el proyecto y las normas urbanísticas de cada municipio.
Ejemplo para el resto
El Ayuntamiento de Simat estudia ahora recurrir también el segundo tramo que afecta a su término municipal y que incluye un trazado soterrado por el interior del casco urbano, a menos de cuatro metros de las viviendas. Se trata del tramo central de la línea Vilanova de Castelló-Gandia, que discurrirá por La Valldigna, y que la Consejería de Industria autorizó la pasada semana.
Los ayuntamientos de Benifairó y Tavernes de La Valldigna también han anunciado su intención de agotar la vía administrativa, apelar a la justicia e incluso promover movilizaciones cívicas para paralizar las obras. Asimismo, siguiendo el ejemplo de Simat, contemplan la posibilidad de denegar a Iberdrola la licencia de obras para la ejecución del trazado.
La decisión del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo, en primera instancia, y ahora el fallo favorable del TSJ de Valencia, abre para estos municipios una nueva esperanza de paralizar el proyecto, que consideran una "aberración" por su impacto visual y ambiental.
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