El Papa envía al cardenal Laghi con un mensaje para Bush

Juan Pablo II envió ayer al cardenal Pío Laghi a Washington con un mensaje de paz para el presidente George W. Bush. Laghi, de 80 años, nuncio del Vaticano ante la Casa Blanca entre 1980-1988, es consciente de la dificultad de su misión. "Salgo con mucha confianza", declaró al diario Il Corriere della Sera, en vísperas del viaje. "Insistiré en la necesidad de que se recorran todos los caminos pacíficos posibles para lograr el desarme de Sadam Husein".

Laghi, que reconoce mantener aún amistad con George Bush padre, se propone transmitir a Bush la inquietud de la Santa Sede ante "el incierto resultado de una guerra en Irak, que puede ser muy injusta y dolorosa para muchos seres humanos". "Hay que sopesar cuidadosamente las consecuencias antes de tomar una decisión que no permite marcha atrás". .

En contra en 1991

En vísperas de la guerra del Golfo, en 1991, Juan Pablo II envió también sendas cartas a Sadam Husein y a George Bush padre, sin lograr sus propósitos pacificadores. La guerra obtuvo el visto bueno de la ONU, pero no el del Vaticano.

El Papa ha convocado para mañana una jornada de ayuno por la paz, iniciativa que cuenta con el apoyo del Consejo Ecuménico de las Iglesias de Ginebra, sede de las iglesias protestantes y ortodoxas. El pasado miércoles, Karol Wojtyla recibió a representantes de la Iglesia metodista, a la que pertenece Bush, que le expresaron también su rechazo a la guerra.