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ESTRENOS
Columna
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América ya nació matando

No tiene piedad para su país. Gangs of New York es un Blade runner del pasado, retrato de un sombrío infierno del que uno desea que la pareja protagonista pueda escapar. ¿Fue Five Points, el barrio del sur de Manhattan que la película pretende reflejar, tan tremendo como nos lo muestra? Posiblemente, aunque otras crónicas cuentan que también hubo allí (además de bandas asesinas, ladrones, prostitutas y alcohólicos) hilanderas, artesanos, aprendices, obreros; y unión sindical.

Pero lo que Scorsese cuenta es otra historia: la esencia de su América. Y lo hace con una violencia que, aunque supera con creces sus propias medidas respecto al asunto, de repente se hace soportable. ¿Por qué? Porque si hubo pretensiones de realismo en el proyecto, el resultado es nada más, y nada menos, que un soberbio espectáculo de aventuras, un Dumas pasado por Dickens, remojado en Lang y con unas gotas de Broadway. Tres horas de entretenimiento que se hacen cortas porque, como suele decirse, de todo hay en ellas: un malo malísimo, un guapo buenísimo que merece vengar a su padre, una puta bella y redimible, montones de acción, algunas canciones, masas de verdad, decorados espléndidos, efectos especiales inteligentes...

Más información
El violento Nueva York de Martin Scorsese

Más esa mala leche que Scorsese no puede ni quiere evitar. No me extraña que a Miramax se le pusiera el logotipo de punta cuando vio en qué derivaba la película, ni confío en que ésta haga una gran carrera en Estados Unidos, en estos momentos. ¿Policías brutales que, al servicio de políticos corruptos, obligan a los inmigrantes recién desembarcados a alistarse en la guerra civil? ¿Conscriptos insurrectos, barridos a cañonazos por la Armada del país de las promesas y la libertad? ¿La propia guerra civil, explicada como una rapiña más? ¿Los ricos, repulsivos, y los pobres, cargados de razones y entregados, en una orgía final, a linchar negros? Y, como guinda, la secuencia en que Cameron y Leo buscan amigos muertos entre velas encendidas, algo que parece un recordatorio del 11-S.

Qué estupenda, apasionante película de aventuras.

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