_
_
_
_
Tribuna:
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Esker mila, Rosa eta Fernando

Este es un artículo de encargo.

Los lectores conocen seguramente que Joseba Pagaza fue asesinado por ETA hace menos de dos semanas. Los adultos de la familia debimos hacer frente a una crisis muy dolorosa desde el momento en que conocimos aquella noticia y decidimos algunas cosas: la primera, preservar la imagen de la mayor parte de nosotros, muy especialmente de los menores, para facilitar la vida cotidiana una vez pasados los primeros días del interés informativo. Los medios de comunicación se portaron con un respeto y profesionalidad que no podemos agradecer suficientemente.

La segunda decisión que tomamos fue política, porque a Joseba lo asesinaron por motivos estrictamente políticos; como por motivos estrictamente políticos asesinaron también en Andoain a José Luis Lopez de Lacalle. Por motivos estrictamente políticos son perseguidos los líderes naturales del partido socialista en Andoain: les queman los coches, las casas, les envían cartas aterradoras, les recuerdan la amenaza de la muerte ante su casa, en sus felpudos... Y es que en Andoain ha gobernando el PSE-PSOE en diversas ocasiones y en las últimas elecciones locales la lista de los socialistas quedó a un puñado de votos de la de Batasuna. La estrategia es descaradamente sencilla: acobardar, debilitar o eliminar a los no nacionalistas para que, poco a poco, elaboremos peores listas, obtengamos menos votos y democráticamente vayamos desapareciendo de los pueblos de Euskadi. El PNV tuvo en los últimos años varias oportunidades para devolver la dignidad democrática a ese pedazo de nuestra tierra donde la vulneración de derechos humanos resulta especialmente intolerable; con hechos, desbancando a Batasuna de la alcaldía, demostrando que la operación del terror es inútil. Pero prefirió -ha preferido- esconderse detrás de la palabrería y abandonarnos a nuestra suerte. Aunque esto no sólo pasa en Andoain.

Los familiares de Joseba no deseábamos favorecer el disimulo acerca de la crisis política de Euskadi

Los familiares de Joseba no deseábamos recibir a los que firmaron el Pacto de Lizarra y el pacto secreto con ETA. Ni a sus herederos institucionales. No deseábamos favorecer el disimulo acerca de la crisis política de Euskadi. Porque, tras los parámetros de bienestar social que compartimos con el resto de la Unión Europea, aquí se mata por pensar y por decir, y este Gobierno nacionalista da fe de que las cosas están muy mal pero ha decidido liderar sólo a los nacionalistas. No puedo negar que consideramos en lo concreto responsables, por negligencia política, a los nacionalistas que decidieron que Joseba regresara a Andoain, a pesar de nuestro ruego, por obligarlo a volver a donde lo habían de matar. No deseamos que ninguno de ellos conozca la carga infinita de angustia que nos hemos obligado a disimular delante de nuestros hijos desde entonces. Pero continuemos. Los familiares de Joseba hacemos nuestros los actos del Partido Socialista y de Basta Ya en estos días y consideramos que Xabier Arzalluz, Juan Mari Juaristi o Joxe Joan González de Txabarri han calumniado,amenazado y bramado contra Joseba y nuestra familia mediante persona interpuesta, al hacerlo contra Basta Ya, contra el PSOE, contra Rosa Díez, contra Fernando Savater, con un estilo que no desmerecerá del comunicado con que ETA se responsabilizará de este asesinato. Ahora bien, no tenemos ninguna duda de que huyen hacia adelante porque temen las críticas merecidas que algún día abrirán la brecha que traerá el cambio de ciclo político en Euskadi, como en el resto de sitios civilizados pasa cuando el gobierno ha perdido el norte político.

Por eso creemos que buscarán disimular su responsabilidad. Por eso no podrán entender jamás que Rosa Díez y Fernando Savater son nuestra familia por voluntad propia. Que en el acto de despedida de Andoain el pasado 10 de febrero, al escuchar la canción pirata, sonreímos pese al dolor, por puro amor a Joseba y a la libertad por la que deseamos seguir viviendo.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Es un artículo de encargo. De Estíbaliz Garmendia, Pilar Ruiz e Iñaki Pagazaurtundua... De todos nosotros. Mila esker eta ohore Rosa, Fernando. Muxu bat beti zuri, Joxeba maitea.

Maite Pagazaurtundua Ruiz, hermana de Joseba, escribe y firma este artículo en nombre de la familia Pagazaurtundua Ruiz.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_