El Tribunal de Cuentas pide información a RTVE sobre los contratos de directivos

El Tribunal de Cuentas ha solicitado a RTVE documentación suplementaria sobre los contratos de directivos del ente público que percibían remuneraciones adicionales por la cesión de derechos de imagen. Estos contratos afectan al ex director general, Javier González Ferrari, y al ex jefe de informativos de TVE, Ernesto Sáenz de Buruaga. En su comparecencia parlamentaria, el responsable del ente público, José Antonio Sánchez, aseguró que no hubo irregularidades, ya que el contrato de Buruaga se resolvió "de mutuo acuerdo" sin que existiera "baja voluntaria".

Sánchez realizó en la Comisión de Control de RTVE del Congreso una encendida defensa tanto de González Ferrari (que desde septiembre pasado ocupa la presidencia de Onda Cero) como de Sáenz de Buruaga (actual consejero delegado de Antena 3). Aseguró que percibían una misma retribución por dos conceptos: como directivos y como presentadores. El PSOE recordó que el contrato de Buruaga incluía una cláusula según la cual debería indemnizar a RTVE por daños y perjuicios en caso de incumplir con su obligación de ceder en exclusiva su imagen a TVE (cuantificada en 31,5 millones de pesetas) en los términos pactados tras su "baja voluntaria".

Sánchez recalcó ayer que en realidad Buruaga no causo baja voluntaria, sino que se fue "de mutuo acuerdo con la empresa", lo cual le eximiría de cualquier indemnización. Añadió que si el Tribunal de Cuentas no tenía esa documentación sería fruto de "un error humano" de la Intervención Delegada de Hacienda en RTVE, organismo en cuyos informes se apoya el tribunal fiscalizador. Esta entidad reclamó el pasado martes información adicional sobre los contratos de directivos del ente público, para lo que dio un plazo de 20 días. "No hay la más mínima anomalía, todo está documentado", recalcó Sánchez.

El propio Ernesto Sáenz de Buruaga remitió ayer un escrito al presidente del Tribunal de Cuentas en el que señala que su contrato se resolvió el 1 de mayo de 1998 "de conformidad con lo previsto en su estipulación 7ª, sin derecho a indemnización alguna". El periodista pactó con el entonces director de TVE, Ángel MartínVizcaíno, que quedaban extinguidas "todas las obligaciones y compromisos contraídos por las partes" anteriormente.

El portavoz socialista, Máximo Díaz-Cano, exigió al actual director general que cumpla la ley que prohibía percibir más de una remuneración a cargo de los presupuestos del ente salvo autorización expresa del Ministerio de la Presidencia. Añadió que el hecho de que no se reclamen indemnizaciones es una prueba más de "pool mediático de medios de comunicación al servicio del Gobierno", en referencia a TVE y a Antena 3-Onda Cero, empresas gestionadas por el grupo Admira.

Sánchez subrayó que tras el nombramiento de Ferrari como director general dejó de percibir otras remuneraciones. Anteriormente compaginó su cargo de director de RNE con la presentación de Los desayunos de TVE.

Los diputados socialistas preguntaron también por la utilización de intermediarios en la compra de películas (lo que provocó, según el Tribunal de Cuentas, un sobreprecio) y la "excesiva" contratación de asesores (hasta 155). Sánchez replicó que la contratación a través de empresas intermediarias es una práctica habitual en el sector cinematográfico y aseguró que en mucho casos tales asesores eran "gente de prácticas".

Sánchez detalló también los términos del contrato de Operación Triunfo como fruto de "una negociación rigurosa". Dijo que TVE consiguió una rebaja del 21,5% en el coste del programa al tratarse de un formato rechazado por otras cadenas. Subió, sin embargo, el precio de las galas especiales (un 0,93%) y de la gala de Eurovisión (14,2%). Adelantó que esta temporada la previsión de ingresos por publicidad y comercialización es de 40,7 millones de euros, de los que se han recaudado 21,3 millones.