Los populares descartan negociar con el PNV sus enmiendas al IRPF

El Partido Popular presentó ayer las enmiendas que pretende introducir en las normas forales que reforman el IRPF en los tres territorios para mejorar el tratamiento fiscal a las familias, pero descartó negociarlas con el PNV y Eusko Alkartasuna, lo que supone que no van a poder prosperar ni en Vizcaya ni en Guipúzcoa. El PSE, cuyo apoyo es imprescindible para el cambio salga adelante en Álava, quiere que se aumente la cuantía de la ayuda mensual a las madres trabajadoras.

Las enmiendas del PP incluyen la paga de 100 euros al mes para las madres trabajadoras con niños menores de 3 años, ya aplicada por el Gobierno central, y deducciones por hijos, por gastos de compra de vivienda por familias numerosas, por adquisición de libros de texto y por gastos de adopción internacional. En el caso de la deducción por hijos, las enmiendas del PP se presentarán sólo en Vizcaya y Guipúzcoa con el objeto de equiparar las otorgadas por estos territorios a la vigente en Alava, que es de 460 euros por el primer hijo, de 565 por el segundo, de 850 por el tercero y de 1.060 por el cuarto y siguientes.

El parlamentario y portavoz en la comisión de Economía y Hacienda, Anton Damborenea dijo ayer que hay una diferencia sustancial en la filosofía de la reforma planteada por el PP y la del Gobierno vasco. "Nuestras propuestas pretenden que las mujeres puedan seguir trabajando aunque tengan hijos; las del Gobiernovasco, que las mujeres dejen de trabajar para cuidar a sus hijos".

Sin embargo las enmiendas no podrán salir adelante sin el apoyo del PNV en Vizcaya y Guipúzcoa, y del PSE en Álava. El PNV ya ha dicho que no comparte la filosofía de la paga de 100 euros a las madres trabajadoras y, por lo tanto, no va a apoyar esa enmienda, aunque podría haber una coincidencia de pareceres en cuanto a la equiparación de las deduciones por hijos establecidas en Álava a los otros dos territorios.

Más subvención

El PSE, por su parte, plantea que la paga para las madres trabajadoras sea superior a los 100 euros fijados por el Gobierno del PP y que se abone hasta que los niños cumplan cinco años, en vez de los tres actuales. El voto favorable del PSE es imprescindible en Álava para que prospere esta subvención a las madres.

Por el contrario, las tres diputaciones han llegado a un acuerdo para eliminar el Impuesto de Actividades Económicas (IAE), aunque no sobre quién debe asumir la compensación a los ayuntamientos por la cantidad que dejan de recaudar. Álava quiere que el 100% proceda de los fondos del Gobierno vasco, mientras el restos de las instituciones proponen un reparto del 66% de la carga para el Ejecutivo y del 34% para las diputaciones.

El resto del IRPF reformado queda prácticamente igual en los tres territorios. Los tipos de gravamen se reducen en torno a un 2% en todos los tramos, de forma que el mínimo se sitúa en el 15% (igual que en territorio común), mientras que el máximo baja al 48% (45% en el resto de España). No tendrán la obligación de presentar la declaración las personas cuyos ingresos anuales no alcancen los 8.500 euros.