Chipre, nueva bandera por concurso

Los dos viejos dinosaurios de la política chipriota, el turcochipriota Rauf Denktash y el grecochipriota Glafkos Clerides, íntimos enemigos desde hace 30 años, han conseguido ponerse de acuerdo en algo. El pasado 23 de enero ambos dieron su visto bueno al concurso internacional convocado por la ONU para el diseño de una nueva bandera y la composición de un nuevo himno para esta isla mediterránea, dividida desde que en 1974 las tropas turcas ocuparon su zona norte.

La iniciativa es un paso más en los esfuerzos de Naciones Unidas para lograr antes del próximo día 28 un acuerdo entre las dos comunidades que permita el ingreso de un Chipre reunificado en la Unión Europea en 2004. Así lo dice la propia ONU en los anuncios de la convocatoria que publican estos días a toda página los diarios chipriotas: "La nueva bandera y el himno deben representar el compromiso con un futuro común, en un espíritu de cooperación, tolerancia y reconstrucción en un reunificado e independiente Chipre".

"Si un chipriota ganara una medalla olímpica, sonaría el himno griego; nosotros no tenemos"

La convocatoria establece que el diseño de la bandera debe ser rectangular y lo suficientemente fácil para que un niño la pueda pintar. El himno, que no necesariamente debe tener letra, tiene que durar entre 30 y 60 segundos. El concurso se fallará el próximo día 17 y no habrá ninguna recompensa económica para el ganador.

La bandera actual de Chipre existe desde su independencia del Reino Unido en 1960 y fue creada por un artista turcochipriota. Es la única del mundo que incluye un mapa del país. En concreto, una silueta de la isla de color dorado sobre un fondo blanco con dos ramas de olivo debajo. La enseña de la llamada República Turca del Norte de Chipre, reconocida internacionalmente sólo por Ankara, es la bandera turca invertida: una media luna y una estrella rojas sobre un fondo blanco.

El himno sí será una auténtica novedad. Como comenta a EL PAÍS el grecochipriota Sófocles Roussos, diseñador gráfico, "en el caso hipotético de que un atleta chipriota ganara alguna vez una medalla olímpica, en la ceremonia sonaría el himno griego, porque nosotros no tenemos ninguno". Lo mismo ocurre en la zona ocupada: en los momentos cumbre suena el himno nacional turco.

Roussos va a presentarse al concurso. No puede revelar los detalles del diseño de la nueva bandera en la que trabaja, pero sí su idea central: "Primarán los símbolos comunes de Chipre y limitaré al máximo aquellos con los que tradicionalmente se identifican las dos comunidades".

El médico Yannis Lauris, líder de la asociación bicomunal Plataforma para la Reunificación Ya, está totalmente a favor de la iniciativa de la ONU, porque "ayuda a preparar a la gente para la reunificación, a que piensen que la solución está ya en camino". Lauris también participará en el concurso. Su diseño, dice, "será algo completamente diferente, en la línea del arte moderno, que sirva de símbolo de colaboración, que exprese que los chipriotas vamos juntos hacia el futuro".

La ONU ha querido ser prudente con el exceso de optimismo y ha advertido de que el anuncio "no debe ser tomado como una indicación de la marcha de las negociaciones". Aún quedan muchas rondas de conversaciones entre los líderes de las dos comunidades y muchas cuestiones económicas por concretar.

Pero si el plan que la ONU puso en marcha el pasado noviembre sigue adelante y se llega a un acuerdo el día 28, sólo quedará la celebración de sendos referendos en las dos partes de la isla el próximo 30 de marzo para que nazca un nuevo país al que Denktash y Clerides tendrán que bautizar. Chipre, Unión de Chipre e incluso Estados Unidos de Chipre son algunos de los nombres que ya han empezado a circular.